Homenaje a Josep Ribera. Una vida dedicada a la lucha y la defensa de los derechos humanos y la democracia
Familia, amigos, compañeros de itinerario vital y profesional, socios, colaboradores, patronos y personal de CIDOB quisieron homenajear la figura de Josep Ribera, quien fue el fundador y primer director de CIDOB.
Una Sala Maragall llena de gente, emociones, reencuentros, abrazos, memoria, respeto y reconocimiento. Así fue el homenaje que CIDOB organizó en su sede el pasado 27 de noviembre en memoria de Josep Ribera, Pep (como todos le conocían), y que falleció el pasado mes de agosto de 2017 "discretamente, sin hacer ruido, como era su estilo" –en palabras del actual director, Jordi Bacaria–" pero también con su firmeza e integridad características".
Josep Ribera fundó CIDOB en 1973 y dirigió la institución hasta 2008, dándole la orientación precisa para que se fuera adaptando a los retos que se iban planteando, pero sin perder nunca su huella y esencia original y conceptual de compatibilizar valores, análisis, investigación y diseminación. Josep Ribera quería a CIDOB porque formaba parte de su vida y, por ello, tras dejar la dirección, continuó defendiéndolo con firmeza y convicción como miembro de su patronato hasta su deceso.
Antoni Segura, presidente de CIDOB, abrió el turno de intervenciones para decir que "este no debería ser un acto triste", sino un acto de reconocimiento del compromiso cívico y solidario de Josep Ribera, y de su "apuesta por crear, aún en plena dictadura y después durante la transición, instituciones transversales –como CIDOB y ACSAR– que fueran un reflejo del país, de sus ansias de libertad, de justicia social y de esperanza en el futuro".
Eulàlia Vintró y Arcadi Oliveres hicieron un breve recorrido por la historia y etapas vitales de Josep Ribera y, por extensión, de CIDOB. Eulàlia Vintró habló de "respeto y admiración a la labor desarrollada a lo largo de su vida" y Arcadi Oliveres recordó su etapa chilena y lo calificó como "un pionero del análisis". Yolanda Onghena, por su parte, quiso ilustrar su relación particular con quien fue su director durante más de 15 años, a través de anécdotas vividas por ella en primera persona y de una acuarela que comprar juntos en los Oudayas (Rabat). "Compartía contigo su mirada crítica, pero te permitía crecer en tu propio horizonte", lo que para Yolanda Onghena era una manera humilde de "dirigir delegando, algo que no se llama poder, sino empoderamiento".
Cesca Munt, viuda de Josep Ribera y segunda alma máter de CIDOB, subió al estrado para agradecer el homenaje recibido y la publicación que también se ha editado en su memoria, titulada A Josep Ribera.
Jordi Bacaria, durante su intervención, hizo mención de algunos fragmentos de los 27 artículos de esta publicación que han sido escritos por personas que acompañaron a Josep Ribera y CIDOB en algún momento a lo largo de los 35 años de historia de la institución durante los que el homenajeado fue su director. Precisamente la publicación finaliza con un capítulo que recoge algunas reflexiones del propio Josep Ribera extraídas de entrevistas y artículos realizados entre los años 1991 y 2007.
Por último, Jordi Bacaria anunció que el espacio que había ocupado la antigua biblioteca ahora pasa a llevar el nombre de Sala Josep Ribera, y quiso subrayar el compromiso de todo el equipo de CIDOB con su legado, para preservarlo y hacerlo avanzar porque "hoy y siempre aquí en el CIDOB todos somos Josep Ribera".
Todo el equipo de CIDOB, con afecto y respeto, expresamos nuestro profundo agradecimiento a Josep Ribera i Pinyol (el Pep), por su legado y por los caminos que hemos abierto y recorrido juntos.
Vídeo resumen del acto de homenaje a Josep Ribera