Las pateras son el síntoma, no la enfermedad

En Europa, desde que Italia lanzó la operación Mare Nostrum en octubre del 2013, tras la tragedia de Lampedusa, la Marina italiana ha rescatado a más de 120.000 refugiados (93.000 entre enero y julio del 2014), con un coste de 89 millones de euros. Y no parece que eso esté haciendo temblar los cimientos de la sociedad italiana. La clave parece estar, por tanto, en la voluntad política y el grado de solidaridad social para afrontar el problema, no en las cifras.