Thaksin Shinawatra

Hijo de un próspero comerciante propietario de negocios tan dispares como sederías, líneas de autobuses y salas de cine, y de una miembro de la nobleza, a los 15 años abandonó su aldea natal y se mudó con sus padres y sus hermanos a la ciudad de Chiang Mai, capital de la provincia homónima situada en el extremo norte del país, donde estudió en el Montfort College, que impartía sus clases en inglés. En 1967, completada su educación secundaria, se alistó en las Fuerzas Armadas y al cabo de seis años se graduó con excelentes calificaciones en la Academia de Cadetes de Policía. Su carrera estaba destinada a la alta oficialidad y, con ayuda de una beca del Gobierno, siguió formándose en Estados Unidos. En 1975 se licenció en Derecho Penal por la Universidad de Eastern Kentucky y tres años después obtuvo un doctorado en la misma especialidad de criminología por la Universidad Sam Houston de Texas.

De vuelta a Tailandia entró de profesor en su antigua academia policial y desempeñó una serie de cargos en el poder, desde 1976 de nuevo absolutamente en manos de los militares luego del breve paréntesis civil de 1973-1976. Thaksin fue inspector en la oficina policial del Palacio Real, responsable de escolta ministerial y adjunto al superintendente del Centro de Inteligencia de la Policía. Su experiencia en Estados Unidos con las técnicas informáticas aplicadas a la criminología resultó de utilidad para la modernización de la base de datos de la Policía tailandesa. Posteriormente sirvió como mayor y superintendente de división dentro de la Central de la Policía metropolitana de Bangkok, pero en 1987, según sus palabras "aburrido" de un trabajo "burocrático e improductivo", colgó el uniforme con el galón de teniente coronel e imprimió un giro radical a su trayectoria para dedicarse al mundo de los negocios.

Ya desde 1982 dirigía una pequeña firma comercial de ordenadores clónicos basados en los sistemas de IBM que nominalmente estaba a nombre de su esposa, Potjaman, por la incompatibilidad con la función en la Policía. A finales de los años ochenta, mientras el país transitaba suavemente de la dictadura militar que bajo distintos regímenes se había sucedido desde el final de la Segunda Guerra Mundial a una democracia parlamentaria tutelada, la compañía Shinawatra Computer aumentó su volumen de negocio y extendió sus operaciones del alquiler de equipos informáticos a organismos públicos (incluyendo los antiguos patrones de la Policía) al ramo de las telecomunicaciones, como radiobalizas, telefonía celular, televisión por cable y sistemas vía satélite. En 1990 la Autoridad Telefónica del Estado le concedió una licencia exclusiva de operador de telefonía móvil de 20 años de duración, negocio pingüe que corrió a cargo de su firma Advanced Info Services (AIS) y que vertebró la segunda gran compañía del grupo, Shinawatra Communications.

A comienzos de los noventa Thaksin era ya un empresario estrella ensalzado por la prensa especializada como modelo de visión en un momento de desarrollo económico acelerado, que había convertido a Tailandia en un imán para el turismo, el comercio de recursos naturales y las industrias manufactureras de productos directamente destinados a la importación, sobre todo hardware de nuevas tecnologías. Premiado sucesivamente por círculos de empresarios y publicaciones del Sudeste Asiático, Thaksin se convirtió en un personaje público que vertía opiniones sobre diversos temas extraempresariales. Su mensaje recurrente era que debía administrarse el país como un consorcio de compañías, dando primacía a los criterios de producción y eficiencia. Escéptico declarado de cualquier ideología política, su visión de los partidos era la de agrupaciones de trabajo sólo atentas al bienestar de los ciudadanos.

El 2 de noviembre de 1994 el primer ministro Chuan Leekpai, del liberal Partido Democrático (PP, el más antiguo del país), le dio la oportunidad de estrenarse en política nombrándole ministro de Asuntos Exteriores en su gobierno de coalición pentapartito. Puesto que era uno de los hombres más acaudalados del país, para demostrar su compromiso con el servicio público sin interferencia de los intereses privados Thaksin dimitió como presidente de la junta directiva de su grupo. Siguió, empero, como vicepresidente de la Fundación Thaicom, un centro fundado en septiembre de 1993 para promover la educación infantil vía satélite en áreas rurales mal comunicadas con centros de enseñanza secundaria. El ministerio de Thaksin formaba parte de la cuota de poder concedida al Partido de la Fuerza Moral (Palang Dharma, PPD), formación de filosofía budista que bajo el liderazgo del ascético Chamlong Srimuang (en todo la antítesis del expansivo y arrollador Thaksin) llevó el peso de la protesta popular de mayo de 1992 contra el último dictador militar, el general Suchinda Kraprayoon.

El 10 de febrero de 1995 Thaksin hubo de dimitir afectado por una nueva ley que restringía las propiedades económicas de los altos oficiales del Gobierno, pero no renunció a su propósito de labrarse una carrera política, para la que emplearía su enorme fortuna personal. El 28 de mayo siguiente, días después de que Chamlong provocara la caída del Gobierno de amenazando con votar en contra de una moción de confianza y forzara de paso la convocatoria de elecciones anticipadas, Thaksin fue elegido en una decisión consensuada presidente del partido, que arrastraba graves dificultades económicas y un reguero de deserciones.

El liderazgo de Thaksin no supuso el revulsivo que el PPD necesitaba y en las elecciones del 2 de julio de 1995 cayó a los 23 escaños, justo la mitad de los ganados en septiembre de 1992. Con todo, el ambicioso empresario obtuvo el escaño en la Cámara de Representantes por la circunscripción segunda de Bangkok y encabezó un grupo parlamentario susceptible de encajar en la próxima mayoría de Gobierno. En efecto, el nuevo primer ministro y jefe del partido más votado, Banharn Silpa-Archa, del conservador Partido de la Nación Thai (Chart Thai, PCT), le nombró el 20 de julio viceprimer ministro de un gabinete integrado por seis partidos, con la misión de supervisar el tráfico y el transporte en el área metropolitana de Bangkok. La tarea no era en absoluto baladí, pues los gigantescos embotellamientos viales en la urbe asiática pasaban por uno de los principales problemas del país por las pérdidas que causaban a la actividad económica.

El 14 de agosto de 1996 Thaksin dimitió del ejecutivo como preludio del motín de los partidos aliados al PCT contra Banharn para que convocara nuevas elecciones. En los comicios del 17 de noviembre el PPD sufrió un tremendo varapalo y se quedó con un único escaño, precipitando la dimisión irrevocable de su presidente al día siguiente. Desde hacía un año Thaksin venía aireando sus simpatías por el ex general Chavalit Yongchaiyudh, líder del centrista Partido de la Nueva Aspiración (Khwam Wang Mai, PKWM), para el cargo de primer ministro. Chavalit se convirtió efectivamente en jefe del ejecutivo el 1 de diciembre como jefe del partido más votado en noviembre, y el 15 de agosto de 1997 reintegró a Thaksin en el gabinete de coalición como viceprimer ministro independiente.

El segundo ministerio de Thaksin duró hasta que el 9 de noviembre de 1997 Chavalit dimitió sobrepasado por la magnitud de la súbita y aguda crisis financiera (de donde saltó a toda Asia Oriental) y Chuan y sus aliados formaron otro gobierno de coalición. En su breve ejecutoria Thaksin no había resuelto en lo más mínimo el caos circulatorio de la capital. Los embates de la crisis económica, al cabo de muchos años de crecimiento que ahora se revelaba asado en prácticas especulativas, en burbujas financieras sin respaldo sólido y ajeno a reformas estructurales exigidas por la nueva economía global, proporcionaron un terreno abonado a las propuestas populistas de Thaksin, decidido a hacerse un hueco en el abigarrado panorama partidista tailandés. Así, el 14 de julio de 1998 fundó su propio partido de pintoresco nombre, Thai Rak Thai (TRT), que literalmente significa "los thais que aman a los thais", en referencia al pueblo tailandés. La argumentación del magnate metido en política era que el país necesitaba otra generación de dirigentes, cuadros nuevos no hipotecados por los cabildeos partidistas y los clientelismos tradicionales, capaces de encarrilarlo por una nueva etapa de crecimiento espectacular.

Aunque la imagen del Gobierno se había visto erosionada por una serie de escándalos de corrupción en algunos ministerios, Chuan acudió a las elecciones legislativas de enero de 2001 satisfecho de la moderada recuperación económica iniciada en 1999. En efecto, la pronta estabilización de la moneda, el baht, había permitido a Tailandia prescindir de los créditos del FMI, si bien seguía tomando nota de sus recomendaciones. Chuan había iniciado reformas estructurales para devolver la solvencia al sistema financiero en su conjunto y asegurar la afluencia de capitales extranjeros, pero la cura de austeridad estaba impacientando a una población que recordaba los altos niveles de consumo e inversión anteriores a la crisis. No obstante estos logros, las encuestas indicaban que Chuan, hombre honesto y capacitado pero incapaz de ilusionar a la población con un objetivo populista por su estilo grave e intelectual, no podía rivalizar con la seducción mediática de Thaksin, el hombre que, entre otros grandes despliegues publicitarios, había traído a golpe de talonario al golfista Tiger Woods a jugar a Tailandia, o que con tintes nacionalistas se quejaba del corsé impuesto por el FMI a la economía nacional con la aquiescencia de Chuan.

En noviembre de 2000 la Comisión Nacional Anticorrupción se puso a investigarle por el supuesto empleo de testaferros para ocultar sus participaciones empresariales cuando su servicio en el Gobierno en 1997 y por evasión fiscal. Pero mientras Thaksin se exponía a ser inhabilitado en la política durante cinco años, su popularidad no hacía más que aumentar. Con la esclarecedora divisa de "mejor morir que vivir como un perdedor", el inquieto multimillonario prometió un nuevo despegue económico y un combate a muerte contra la gangrena de la corrupción administrativa, fenómeno del que Tailandia es cabecero mundialmente. Particular sensación causó su propuesta de otorgar un fondo de desarrollo de 23.000 dólares a cada uno de los 70.000 pueblos y aldeas del país y una moratoria de tres años en el pago de la deuda contraída con el Estado por los campesinos con menos ingresos. Con toda lógica, el TRT se aseguró un apoyo masivo en las áreas rurales.

La incidencia en estas ofertas obedecía al peso del sector primario en la economía nacional: pese a la industrialización acelerada de los últimos años y a la masificación de las ciudades, todavía más de la mitad de los 61 millones de tailandeses dependía directamente de la actividad agropecuaria. Por otro lado, algunos observadores se preguntaron como podría llevar a cabo Thaksin sus proyectos de liberalización del sector de las telecomunicaciones sin perjudicar los intereses de Shin Corp., denominación desde 1999 de su emporio hegemónico, o cómo relanzar la economía inyectando dinero público sin agravar el déficit presupuestario.

Antes de lanzarse a la lid electoral Thaksin escenificó la plena entrega de su imperio económico a su esposa, pero las sospechas de que él iba a seguir siendo el titular en la sombra calaron hondo en la opinión pública. Entonces la Shin Corp. consistía en un conglomerado con dos grandes divisiones: Shinawatra Computer and Communications Plc y Advanced Info Services Plc, además de participaciones mayoritarias en otras cuatro firmas subsidiarias de telecomunicaciones, incluida la cadena televisiva ITV. En diciembre la Comisión Anticorrupción le abrió una acusación formal sobre la que debía pronunciarse el Tribunal Constitucional. Este hecho no detuvo, sin embargo, su carrera electoral, a pesar de las voces que advertían contra un eventual primer ministro bajo sospecha.

En las elecciones del 6 y 29 de enero de 2001 el TRT consiguió una victoria apabullante para los estándares tailandeses al ganar 248 de los 500 escaños que integraban la nueva Cámara de Representantes de la Asamblea Nacional. Los 48 escaños adjudicados por el sistema proporcional basado en listas -los otros 200 se cubrieron mediante el sistema de votación a una vuelta en las circunscripciones uninominales- fueron ganados con el 40,6% de los votos. Era la primera vez en la historia electoral tailandesa que un partido rozaba por sí solo la mayoría absoluta. Tal como había anunciado antes de los comicios, Thaksin negoció la formación de un gobierno de mayoría tan amplia como fuera posible, llegando a un acuerdo con el PKWM y el PCT. En cuanto al centrista Partido de la Justicia y la Libertad (Seri Tham, PST), dirigido por Prachuab Chaiyasarn, decidió fusionarse con el TRT. Todo ello produjo una mayoría oficialista en la Cámara de 339 escaños, más que suficiente para asegurar la investidura y poder gobernar con comodidad. El ejecutivo de Thaksin iba a apoyarse en una base legislativa sin precedentes.

El 9 de febrero la Cámara de Representantes eligió a Thaksin primer ministro, el vigesimotercero desde la abolición de la monarquía absoluta en 1932, con 340 votos a favor, 127 en contra y 30 abstenciones (incluida, como es tradición para los postulantes a puestos del Ejecutivo, la de él mismo). El mismo día, el rey Bhumibol Adulyadej firmó el nombramiento y Thaksin entró en funciones. El día 18 lo hizo el Gabinete, que entre otros incluía al veterano Chavalit como ministro de Defensa. Sobre el flamante Gobierno tailandés flotaba la incertidumbre del futuro de su jefe, ya que de dictar el Tribunal Constitucional un fallo de culpabilidad sobre la imputación de la Comisión Anticorrupción aquel debería dimitir en el acto.

Thaksin Shinawatra es miembro de la junta directiva del Instituto de Estudios Asiáticos y del consejo asesor del Instituto Sasin de Administración de Empresas, ambos pertenecientes a la Universidad Chulalongkorn, así como miembro distinguido del consejo rector de la Universidad Kasetsart, miembro honorario de la Academia de Cadetes de Policía y de la Asociación de Antiguos Oficiales del Ejército, y presidente de la Asociación de Tailandeses del Nordeste, entre otras pertenencias a organizaciones sociales y culturales.

(Nota de edición: esta biografía fue publicada originalmente en 5//2001. Thaksin Shinawatra volvió a formar Gobierno en Tailandia tras las elecciones generales del 6/2/2015, en las que su partido, el TRT, obtuvo una abultada mayoría absoluta. Thaksin convocó unas elecciones anticipadas para el 2/4/2006 y cuyo resultado fue una subida aún mayor de su formación, hasta casi copar la Cámara de Representantes, con el boicot de la mayoría de la oposición. Tres días después de los comicios, el primer ministro cedió sus funciones al viceprimer ministro Chidchai Vanasatidya. El 23/5/2006 Thaksin retomó las funciones gubernamentales, pero el 19/9/2006 fue derrocado por el Ejército en un golpe de Estado encabezado por el general Sonthi Boonyaratkalin, quien constiuyó una junta militar. El 1/10/2006 un antiguo general, Surayud Chulanont , asumió la jefatura del Gobierno como primer ministro interino. Thaksin permaneció exiliado 15 años, hasta su regreso definitivo a Bangkok el 22/8/2023, coincidiendo con la investidura como primer ministro de Srettha Thavisin, candidato del partido thaksinista PPT, el cual había pactado un Gobierno de coalición con las formaciones de la derecha promilitar. Thaksin fue inmediatamente detenido y encarcelado para empezar a cumplir una condena sumada de ocho años de prisión como culpable en tres causas juzgadas en ausencia, pero el 1/9 recibió una gracia real y vio conmuntada esta pena por otra recudida de un año de prisión).