Peter Mutharika
Presidente de la República (2014-2020)
La trayectoria política de Peter Mutharika, presidente de Malawi desde 2014, está íntimamente ligada a la de su hermano seis años mayor, Bingu wa Mutharika, predecesor en el cargo entre las elecciones de 2004 y su fallecimiento en 2012, si bien dispone de un potente currículum profesional completamente autónomo, labrado en el área del derecho. Oriundo de Thyolo, en el extremo sur del país, junto a la frontera mozambiqueña, hoy es el único superviviente de una prole de nueve hermanos concebida por una pareja de maestros de religión cristiana protestante y descendientes de la realeza tradicional tribal en el entonces protectorado británico de Nyasalandia.
Tras terminar sus respectivos estudios secundarios, mientras que Bingu se licenció en Economía por la Universidad de Delhi y después prosperó como alto funcionario del Gobierno de la flamante República de Malawi así como de la ONU y de varios organismos panafricanos, Peter se decantó por la carrera de Leyes. Entre 1965 y 1969 el hermano menor recibió tres titulaciones de grado en las universidades de Londres y Yale. Luego, destinó varios años a dar clases de Derecho Internacional, Derecho Constitucional, Derecho Administrativo y Derecho Contractual en las universidades de Dar es Salaam en Tanzania -país donde en 1971 se colegió como abogado-, Haile Selassie en Etiopía, y Rutgers y Washington en Estados Unidos. También fue docente en el Instituto de las Naciones Unidas para la Formación y la Investigación (UNITAR), dentro de su programa lectivo para oficiales africanos y asiáticos del servicio diplomático, que se impartía en la ugandesa Universidad Makerere.
En las décadas de los ochenta y noventa Mutharika enriqueció su bagaje con una plétora de actividades como consultor y experto internacional, en ocasiones vinculado al sistema de la ONU, amén de conferenciante, ponente de simposios, autor de libros y artículos, asesor editorial y miembro y directivo de asociaciones del ámbito jurídico. Tras alcanzar un sólido peritaje en el campo de la justicia internacional, a principios de los noventa el profesor empezó a involucrarse en las vicisitudes políticas de Malawi, país africano anclado en el atraso y la pobreza, y sometido a la dictadura patriarcal del anciano padre de la independencia, Hastings Kamuzu Banda.
En 1992, coincidiendo con el anuncio por Banda, presionado por las manifestaciones populares en favor de la democracia, de la introducción del multipartidismo, el jurista se incorporó al Comité de Acción de Malawi (MAC), la principal ONG pro Derechos Humanos del país, al que prestó asesoría legal. Más tarde se vinculó al activismo político de su hermano Bingu, convertido en uno de los principales adalides del cambio en Malawi en el seno del partido opositor Frente Democrático Unido (UDF), cuyo líder, Bakili Muluzi, venció a Banda en las históricas elecciones libres de mayo de 1994. Posteriormente, Bingu rompió con Muluzi y en 1997 activó el Partido Unido (UP), al que el economista colocó en oposición frontal al Gobierno del UDF y en cuyas filas Peter adquirió un lugar prominente.
En 2001 el menor de los Mutharika siguió secundando a su hermano cuando este, tras sufrir una estrepitosa derrota a manos de Muluzi en las elecciones presidenciales de 1999, disolvió el UP y regresó al UDF, gesto que le fue recompensando por Muluzi con una generosa promoción institucional. En 2004 Muluzi, confrontado a un rechazo general, renunció a sus planes de presentarse al tercer mandato consecutivo, que la Constitución no le permitía, y cedió la candidatura del oficialismo a Bingu, quien el 20 de mayo fue aupado a la Presidencia por veredicto de las urnas. Una vez instalado en el poder, Mutharika reclutó a su hermano jurista como asesor especial de la Presidencia. Peter agregó a su experiencia internacional las condiciones de delegado por Malawi en los plenarios de la Asamblea General de la ONU en Nueva York y de panelista del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (ICSID), órgano de arbitraje adscrito al Grupo del Banco Mundial en Washington, DC.
El componente político del perfil de Mutharika empezó a prevalecer sobre el de jurisconsulto en mayo de 2009 al salir elegido diputado de la Asamblea Nacional, en representación de la circunscripción de Thyolo East y en las listas del Partido Progresista Democrático (DPP), puesto en marcha por su hermano en 2005 al cabo de una nueva trifulca con el ex presidente Muluzi, quien al haber retenido el mando orgánico del UDF pretendía mantener su influencia en el Ejecutivo. Una vez inaugurado su segundo ejercicio presidencial de cinco años, Bingu colocó a Peter en el Gabinete como ministro de Justicia y Asuntos Constitucionales. A continuación, le confió la cartera de Educación, Ciencia y Tecnología.
El favoritismo de Bingu por su hermano Peter, que podía dar pie a acusaciones de nepotismo, se hizo patente hasta el punto de que en 2010 el presidente reveló sus intenciones de proponer al DPP que el ministro y asesor fuera el candidato a sucederle en las elecciones presidenciales de 2014. Los planes del jefe del Estado concitaron una grave división en el partido, cuya número dos, Joyce Banda, la vicepresidenta de la República, ambicionaba la candidatura electoral para sí. Banda fue expulsada de la cúpula del DPP y marginada de las reuniones del Gabinete, y ella, en respuesta, rompió con el oficialismo, arrastró tras de sí a la facción que le era fiel e inscribió una formación rival, el Partido Popular (PP).
En agosto de 2011 la dirigencia del DPP, dócil a las instrucciones del presidente y pese a las expresiones de repudio en las calles de la capital, Lilongwe, a tal movimiento, que no contribuyó a rebajar el malestar popular por las deplorables condiciones de vida, nominó a Peter Mutharika candidato del Gobierno de cara a las elecciones presidenciales de 2014. Se dio la circunstancia de que por estas mismas fechas Mutharika hubo de abandonar su labor en el ICSID en relación con dos casos de litigios entre el Gobierno de Zimbabwe y unos grupos de inversores privados; las objeciones a su presencia en el panel de arbitraje se fundamentaban en las dudas objetivas sobre su imparcialidad, ya que el Gobierno de su hermano mantenía unas estrechas relaciones con el dictador zimbabwo, Robert Mugabe.
El 8 de septiembre de 2011 Bingu ascendió a Peter nombrándole ministro de Asuntos Exteriores. La oposición siguió cuestionando la elegibilidad de Mutharika para la Presidencia y sacó a colación una posible incompatibilidad constitucional por su nacionalidad presuntamente dudosa, pues circulaban rumores de que había obtenido la ciudadanía de Estados Unidos en algún momento del pasado y la ley de Malawi no admitía la doble nacionalidad. Las autoridades salieron a zanjar la controversia demostrando, a través de la Embajada estadounidense, que Mutharika nunca había disfrutado de la nacionalidad norteamericana, si bien poseía la Green Card, el documento de identidad para súbditos extranjeros con el estatus de residentes permanentes en Estados Unidos; en su caso, esto suponía que permaneciera allí un mínimo de tres meses al año, lo que tampoco resultaba concebible para un nacional de Malawi que aspirara a presidir el país.
El presidente Mutharika, protagonista en los últimos tiempos de una preocupante deriva autoritaria e intolerante con sus detractores de dentro y fuera de casa, falleció el 5 de abril de 2012, a los 78 años, víctima de un ataque al corazón del que no pudieron recuperarle en el hospital sudafricano donde fue ingresado de urgencia, antes de ser trasladado de vuelta a Lilongwe en estado moribundo, o seguramente ya muerto. La noticia del óbito del presidente no fue confirmada hasta pasados dos días, momento en el que Banda, que pese a su ostracismo institucional y su pertenencia a un partido hostil al DPP seguía siendo la vicepresidenta legal de Malawi, prestó juramento como presidente de la República.
Días después de la mudanza en la jefatura del Estado, el 26 de abril, Mutharika cesó como ministro de Exteriores y se dispuso a preparar su candidatura presidencial de 2014, rival de la de la presidenta Banda. Hasta allegado el año de las elecciones, en febrero, el político no renunció a su polémica Green Card. El 20 de mayo de 2014, al cabo de una campaña electoral en la que no se cansó de defender la memoria y el legado de su hermano difunto, y en la que formuló propuestas como avanzar en la diversificación de la precaria agricultura nacional -generadora de una tercera parte del PIB y del 90% de los ingresos por exportaciones, más de la mitad de las cuales correspondían al omnipresente tabaco-, Mutharika se apuntó la victoria con el 36,4% de los votos.
La competición fue bastante apretada, y en orden decreciente le siguieron el predicador evangélico Lazarus Chakwera por el Partido del Congreso de Malawi (MCP, el partido único en tiempos de H. K. Banda), Joyce Banda por su PP y Atupele Muluzi, hijo del ex presidente Bakili Muluzu, por el UDF. En las legislativas, el DPP experimentó un drástico retroceso, pasando de los 114 a los 51 diputados, solo tres más que el MCP. Banda, sin duda castigada por las urnas a causa de un gran escándalo de corrupción destapado en su Gobierno, el conocido como Cashgate, denunció la comisión de fraude en el escrutinio, pero se quedó sola en su exigencia de que se convocara una nueva votación en el plazo de 90 días; sin embargo, la legislación nacional no contemplaba el mecanismo de la segunda vuelta en caso de no superar el candidato de cabeza el 50% de los votos.
Mutharika fue proclamado presidente electo por la Comisión Electoral de Malawi (MEC) el 30 de mayo y al día siguiente prestó juramento como el quinto presidente de la República desde la independencia nacional en 1964. De la ceremonia de inauguración se ausentó Banda, quien de todas maneras dijo aceptar la rama de olivo tendida por Mutharika a todos sus adversarios, invitándoles a unirse a él para "reconstruir" un país "casi al borde del colapso" que dependía vitalmente de la ayuda exterior al desarrollo, ayuda que por culpa del citado Cashgate se encontraba ahora comprometida.
Peter Mutharika está casado desde 2014 en segundas nupcias con Gertrude Maseko y es padre de tres hijos, dos mujeres y un varón, que se ganan la vida como abogados en Estados Unidos.
(Cobertura informativa hasta 1/6/2014)