Arnold Rüütel
Presidente de la República (1990-1992, 2001-2006)
Hijo de campesinos nativos de la isla de Saaremaa, en el mar Báltico y que delimita el golfo de Riga por el norte, estudió peritaje agrícola en la Escuela Köljala, en 1950 se graduó en Ingeniería Agrónoma por la Escuela Técnica de Jäneda y en 1955, obtenida la licenciatura del servicio militar en la Armada soviética, obtuvo una plaza de profesor en la Escuela de Agricultura Mecanizada de Tartu. En 1957 fue nombrado subdirector del Instituto Estonio de Alimentación Animal y Ciencias Veterinarias, y en 1963 director de la Granja Modelo Estatal de Tartu. En 1964 ingresó en la Academia Estonia de Agricultura, futura Universidad Agrícola con sede en Tartu, y en 1969, después de obtener el doctorado en su especialidad, se convirtió en rector de la misma. Hasta aquel año siguió dirigiendo la Granja Modelo de dicha ciudad, la segunda en población de la entonces República Socialista Soviética Estonia (RSSE).
Miembro del Partido Comunista Estonio (EKP) desde su entrada en la Academia de Agricultura y de su Comité Central desde 1971, en 1977 cesó en el puesto de rector para asumir la Secretaría de Agricultura de aquel órgano dirigente comunista. Este nombramiento le catapultó con relativa rapidez a la cúpula del EKP, llegando a primer viceprimer ministro del Consejo de Ministros de la RSSE en 1979 y a presidente del Presidium del Soviet Supremo el 8 de abril de 1983 en sustitución de Johannes Käbin. Puesto que en el sistema soviético la primacía del poder político en las repúblicas recaía en los primeros secretarios de las ramas del PCUS, Rüütel estaba teóricamente subordinado a Karel Vaino y, desde 1988, a Vaino Väljas.
Ahora bien, Rüütel se encaramó al liderazgo del movimiento nacionalista estonio, asumiendo, al igual que sus colegas Algirdas Brazauskas en Lituania y Anatolijs Gorbunovs en Letonia, lo esencial de los planteamientos de las fuerzas propiamente nacionalistas y no comunistas, que en Estonia estaban agrupadas en el Frente Popular (Rahvarinne). Etapas clave de este proceso de separación impulsado por el Soviet Supremo y su presidente fueron la proclamación de la supremacía de las leyes estonias sobre las soviéticas (16 de noviembre de 1988), la anulación de la cláusula sobre el papel dirigente del EKP (23 de febrero de 1989) y las elecciones pluralistas al Consejo Supremo de 105 escaños (18 de marzo de 1990).
El EKP como tal no concurrió a los comicios, pero 55 candidatos miembros del partido resultaron electos en alguna de las listas que se presentaron. Rüütel obtuvo la aprobación del Frente Popular, la fuerza más votada con 43 escaños, y el 29 de marzo, cuatro días después de liderar la mayoría del EKP hacia la escisión definitiva del PCUS en el XX Congreso de la formación republicana, fue elegido presidente de la nueva cámara legislativa. El mismo día 29 los diputados decretaron que el instrumento de independencia firmado con la Rusia bolchevique en 1920 adquiría plena validez y que la anexión a la URSS en 1940 como RSSE careció de legalidad.
Pese a las advertencias de Moscú, el 8 de mayo de 1990 Rüütel presidió la declaración de independencia de la República de Estonia, no tan radical, empero, como la lituana, pues contemplaba la vigencia de la Constitución soviética hasta que entrase en vigor una Constitución nacional. El 12 de mayo Rüütel se reunió en Tallinn con sus homólogos de Letonia, Gorbunovs, y Lituania, Vytautas Landsbergis, para crear un frente común en los procesos de consolidación nacional y para impulsar la cooperación económica de las tres repúblicas bálticas. La estrategia compartida frente al poder soviético incluyó una conferencia cuatripartita con Mijaíl Gorbachov en Moscú el 12 de junio, la cual no produjo otro resultado que la coincidencia en negociar los procesos sin provocaciones y unilateralismos.
La prudencia de Rüütel en su pulso con Moscú le ahorró el régimen de sanciones económicas que durante unos meses padeció Lituania por su aspiración independentista sin cortapisas, pero el intento soviético en enero de 1991 de tomar el control por la fuerza en Lituania y Letonia fortaleció las posiciones nacionalistas en toda la región. En Estonia no se produjeron choques en buena medida gracias a la sintonía, dentro de lo posible dadas las difíciles circunstancias, entre Rüütel y Gorbachov, si bien el Consejo Supremo ordenó medidas de autodefensa en previsión de un golpe de mano de las tropas del Ministerio soviético del Interior.
El 3 de marzo de 1991 la declaración de independencia de Estonia fue aprobada en referéndum por el 77,8 % de los votantes (el 82,8% de los inscritos), y el 20 de agosto, al día siguiente del fallido golpe de Estado dado en Moscú por los mandos soviéticos opuestos al reformismo de Gorbachov, la república proclamó su independencia total e irrevocable. Este hecho fue reconocido en las semanas siguientes por el Consejo de Estado, el órgano ejecutivo provisional de la URSS hasta la creación de una nueva Unión de Estados Soberanos por ocho repúblicas (que jamás se concretaría, ya que Rusia, Ucrania y Bielarús declararon disuelto el Estado soviético el 8 de diciembre), y por la comunidad internacional, en lo que resultó instrumental la diplomacia personal de Rüütel.
Rüütel, los diputados del Consejo y los gobiernos frentepopulistas y de expertos presididos por Edgar Savisaar y, desde enero de 1992, por Tiit Vähi, dirigieron el país en la etapa constituyente que debía definir el sistema político, las políticas económicas para afrontar las gravísimas penurias derivadas del colapso soviético, la posición en la sociedad de la muy importante minoría rusófona (que constituía una tercera parte de la población y que en su mayoría se había opuesto vehementemente a la independencia), así como las relaciones internacionales del flamante Estado.
El 20 de septiembre de 1992 tuvieron lugar elecciones a las nuevas instituciones del presidente de la República, con poderes limitados (exceptuando las atribuciones funcionales, una coparticipación en la política exterior y la suspensión de las normas aprobadas por el legislativo), y el Riigikogu o Consejo de Estado (Parlamento), introducidas por la Constitución del 28 de junio. A ellas Rüütel, que gozaba de una incontestable popularidad por su conducción inteligente del proceso de independencia, se presentó al frente de la alianza Casa Segura (Kindel Kodu), que aglutinaba a los sectores ex comunistas y rusófonos.
Aunque resultó vencedor en las presidenciales con el 42,2% de los votos, al no alcanzar el listón del 50% tuvo que someterse a la investidura del Riigikogu, donde el Kindel Kodu sólo había obtenido 17 de los 101 escaños. De esta manera, el 5 de octubre fue derrotado con 31 votos contra los 59 del intelectual Lennart Meri, el candidato de la coalición nacionalista conservadora Pro Patria (RK Isamaa). En 1993 Rüütel pasó a formar parte del Consejo Municipal de Tallinn y un año después constituyó y pasó a presidir el Partido Popular Rural Estonio (EME) a partir de la fracción parlamentaria de ocho diputados articulada en octubre de 1992.
De cara a las elecciones legislativas del 5 de marzo de 1995, el EME se unió al Partido de la Coalición Estonia (Koonderakond) de Tiit Vähi, la Unión Rural Estonia (Maaliit, EM) de Arvo Sirendi, la Liga Estonia de Pensionistas y Familias (EPPE) de Raoul Üksvärv y la Asamblea de Granjeros (PK) de Eldur Parder en la creación del centroizquierdista Partido de la Coalición-Unión Rural (KMÜ). Esta alianza, heredera del Kindel Kodu y receptora de las problemáticas del agro estonio, se adjudicó una mayoría simple de 41 escaños con el 32,3% de los votos y pasó a integrar el Gobierno hasta el final de la legislatura, bien en solitario, bien con la adición por separado de los partidos del Centro (Keskerakond), Reformista (Reformierakond) o Progresista (EA), y bajo las presidencias sucesivas de Vähi y Mart Siimann.
Rüütel se aseguró una implicación relevante en la política nacional desde su escaño de diputado. El 21 de marzo fue elegido vicepresidente segundo del Riigikogu y el 22 de abril fue escogido para presidir el VI período de sesiones de la Asamblea Báltica. El ex mandatario volvió a competir por la Presidencia de la República en 1996, y el 20 de septiembre, tras varias votaciones parlamentarias infructuosas los días 26 y 27 de agosto, terminó derrotado por el titular, Meri, por 85 votos contra 139.
Por lo demás, el EME concurrió a los comicios del 7 de marzo de 1999 sin el paraguas del KMÜ y con un acuerdo de cooperación con los centristas de Savisaar. En aquella ocasión, que devolvió a las derechas de la Unión Pro Patria (Isamaaliit) al poder, el partido de Rüütel obtuvo el 7,2% de los votos y siete escaños, esto es, la sexta fuerza del Parlamento. Los magros resultados obtenidos reflejaron la limitada base electoral del partido, básicamente integrada por antiguos responsables de granjas estatales y cooperativistas de koljozes, que temían el levantamiento de las medidas proteccionistas en aras de la austeridad presupuestaria y la homologación a los parámetros de la Unión Europea (UE), para cuyo ingreso en 2004 o 2005 Estonia se presentaba más preparada que la mayoría de los países del Centro y Este de Europa.
Rüütel renovó su escaño, pero cesó en la vicepresidencia de la Cámara, y como reacción poselectoral previó la unión con la EM de Sirendi, que se había convertido en una fuerza extraparlamentaria, en el VI Congreso del EME que tuvo lugar el 27 de junio de 1999. El 18 de octubre siguiente el partido pasó a denominarse Unión Popular Estonia (Rahvaliit o ERL) y el 10 de junio de 2000 tuvo lugar la fusión con la EM y la EPPE, que tampoco tenía representación parlamentaria. La formación resultante retuvo el nombre de ERL y eligió a Villu Reiljan presidente ejecutivo y a Rüütel presidente honorario.
El 9 de junio de 2001 el VIII Congreso de la ERL reunido en Tallinn designó a Rüütel candidato a la elección presidencial que debía realizar el Riigikogu el 27 y el 28 de agosto. Como en 1996, ningún aspirante alcanzó la mayoría de dos tercios (68 votos) y la elección recayó en el Colegio Electoral integrado por los 101 parlamentarios y 266 delegados de los gobiernos locales. El 21 de septiembre, contrariamente a lo esperado, Rüütel superó a sus tres rivales, Toomas Savi (Reformierakond), Peeter Tulviste (Isamaaliit) y Peeter Kreitzberg (Keskerakond), con 114 votos, y en la segunda y definitiva ronda celebrada el mismo día batió a Savi con 186 votos.
El éxito de su tercera apuesta presidencial desde la independencia cogió por sorpresa al mismo Rüütel, que en una complicada carambola se benefició de la dispersión del voto gubernamental (la Isamaaliit y el Reformierakond eran socios en el Gobierno) y el acercamiento de la designación del jefe del Estado al electorado popular a través de los representantes locales, ya que el antiguo líder comunista nunca ha perdido una notable cuota de aceptación en las encuestas. El 8 de octubre Rüütel tomó posesión de su mandato quinquenal previa terminación de su pertenencia partidista, como prescribe la Constitución.
En sus primeras alocuciones, Rüütel prometió hacer todo lo posible para acercar las instituciones a la ciudadanía, y rompió una lanza en favor de los ingresos en la UE y la OTAN, en aparente distanciamiento de sus anteriores críticas a un modelo de adhesión comunitaria que da prelación a las transformaciones estructurales sobre determinados estándares de vida. Los observadores han apuntado que precisamente su predicamento sobre los productores agropecuarios permitiría a Rüütel convencerles de la necesidad de modernizar el sector. El retorno de Rüütel al frente de Estonia también podría aparejar un relanzamiento de los tratos multisectoriales con Rusia, que bajo la Presidencia del muy nacionalista Meri registraron profundas desavenencias durante varios años.
Rüütel, que habla el alemán y el ruso, fue nombrado en 1991 doctor honoris causa en Ciencias Agrícolas y profesor emérito de la Universidad Agrícola Estonia. Otros doctorados honoríficos le han sido concedidos por el Bentley College de Waltham, Massachusetts (1991), la Universidad de Helsinki (2002), la Universidad de Nápoles (2002) y la Universidad Agrícola Nacional de Ucrania (2002). Hasta su asunción presidencial en 2001 presidía la Organización Estonia de la Cruz Verde Internacional, la Sociedad B. G. Forselius y el Movimiento para la Protección del Mar de Estonia. Entre 1981 y 1988 encabezó la Sociedad Conservacionista Estonia y en 1993 puso en marcha el Instituto Nacional de Desarrollo y Cooperación, que dirigió también hasta 2001. Ese mismo año publicó un libro de memorias, Tuleviku taassünd (El renacimiento del futuro).
(Nota de edición: esta biografía fue publicada originalmente en 10/2001. El ejercicio de Arnold Rüütel como presidente de Estonia concluyó el 9/10/2006. Su sucesor en la jefatura del Estado fue Toomas Hendrik Ilves).