Tihomir Oreskovic

Próxima a cumplir 25 años como Estado independiente, la República de Croacia ha estrenado el 22 de enero de 2016 su primer jefe de Gobierno no miembro de la conservadora HDZ ni del socialdemócrata SDP, los dos partidos principales de esta democracia parlamentaria. Se trata del independiente Tihomir Oreskovic, un directivo empresarial de la industria farmacéutica con la doble nacionalidad croata-canadiense y que fue escogido por la HDZ y su socio de centro-derecha, el partido Most, para encabezar el Gabinete de coalición cuya puesta en marcha  el resultado de las elecciones de noviembre de 2015, con un práctico empate entre las coaliciones lideradas por la HDZ de Tomislav Karamarko y el SDP del primer ministro saliente Zoran Milanovic, vino a complicar.

Las tareas que Oreskovic, perito en estrategias financieras y comerciales de corporaciones privadas pero con nula experiencia política —perfil que sus promotores consideran una ventaja en las actuales circunstancias nacionales—, se ha encomendado son robustecer la tímida recuperación económica tras seis negros años de recesión, moderar el elevado paro y bajar el déficit y la deuda públicos; estos se saltan con creces los topes de la UE, de la que Croacia es el vigésimo octavo país miembro desde 2013. El nuevo dirigente también promete continuar la política no represiva y cooperativa con los socios europeos para tratar con la crisis de los refugiados de Oriente Medio, cientos de miles de los cuales ya han atravesado Croacia rumbo a Alemania.


(Nota de edición: esta biografía fue publicada originalmente el 25/1/2016. El Gobierno del primer ministro Tihomir Oreskovic fue derribado en una moción de censura parlamentaria iniciada por la HDZ, el mismo partido que vertebraba el Ejecutivo, el 16/6/2016. Oreskovic continuó en funciones hasta la celebración el 11/9/2016 de elecciones generales anticipadas, cuyo resultado fue una mejora de la posición de la HDZ. El 19/10/2016 el líder de la HDZ, Andrej Plenkovic, formó gobierno en coalición, nuevamente con el partido Most).

Nativo de Zagreb, siendo niño emigró junto con sus padres desde la entonces Yugoslavia socialista a Canadá. La familia se radicó en Hamilton, ciudad a orillas del lago Ontario vecina de Toronto, que ya acogía a una nutrida comunidad de expatriados croatas, donde los Oreskovic iniciaron una nueva vida. En 1989 el joven se graduó en Química con el título de Bachelor of Science (BSc) por la Universidad McMaster, con campus en Hamilton, y dos años después, mientras su patria de origen se sumergía en una cruenta guerra de independencia contra el Ejército serbo-yugoslavo, obtuvo un Master of Business Administration (MBA) en Finanzas y Tecnologías de la Información por la misma casa de estudios.

En 1992 Oreskovic dio comienzo a una carrera profesional en el ramo farmacéutico del sector privado que ya no se interrumpiría hasta su sorpresiva elección como primer ministro de Croacia mas de dos décadas después. Su primer contrato fue con la compañía canadiense Rx Plus, recién adquirida por la multinacional estadounidense Eli Lilly (la creadora del famoso prozac), donde fungió de ejecutivo responsable de estrategias comerciales y al frente de las áreas del negocio en diversas regiones del mundo. Su último cometido en Eli Lilly Canada Inc. fue, desde 2003, como vicepresidente del departamento de Asuntos Económicos y Relaciones con el Gobierno de Ottawa. En 2005 fichó por otra firma farmacéutica, Teva Novopharm, luego llamada Teva Canada y parte de las Teva Pharmaceutical Industries Ltd., especializada en medicamentos genéricos, donde comenzó como director financiero. En 2009 tomó a su cargo la nueva región comercial de Europa Oriental, Oriente Medio, Israel y África de Teva Pharmaceuticals, en 2012 asumió la presidencia de la filial Pliva Croatia y en 2014 fue nombrado director financiero de Teva para toda Europa, con despacho en Ámsterdam.

En abril de 2015 Oreskovic, manteniendo su residencia en la ciudad holandesa, se convirtió en el director financiero de la división global de Teva para los medicamentos genéricos. Completamente dedicado a su profesión y sin actividades políticas, nada permitía imaginar que el químico y ejecutivo de corporación privada fuera a salir del anonimato algún día, y menos como consecuencia de un proceso político inconcluso en su país de origen.

Croacia celebró el 8 de noviembre de 2015 sus octavas elecciones legislativas desde el comienzo de la secesión de la antigua Yugoslavia y el acceso a la independencia nacional en 1990, así como las primeras desde el ingreso en la UE en 2013, con el resultado provisional de un empate exacto entre los principales bloques en liza que complicó sobremanera la formación del nuevo Gobierno. A falta de escrutar el voto de los croatas en el exterior, sacaron igual número de escaños, 56, la Coalición Patriótica de ocho partidos de centro y derecha liderados por la Unión Democrática Croata (HDZ) de Tomislav Karamarko, que venía ejerciendo la oposición desde los comicios de 2011, y la alianza de centro-izquierda Croacia Crece, donde llevaba la voz cantante el Partido Social Demócrata (SDP) del primer ministro Zoran Milanovic. Luego, el recuento de los votos de los croatas en el extranjero adjudicó a la cuenta de la HDZ otros tres escaños, quedándose con 59.

Aun sumando a los representantes de la coalición dirigida por la Asamblea Democrática Istriana (IDS-DDI, socia del SPD en el Gobierno saliente de coalición) y de las restantes minorías étnicas, a Milanovic le faltaban nueve escaños para poder renovar en el poder con otro Gabinete de mayoría. La llave del Gobierno de Croacia la tenía el joven partido liberal conservador Puente de Listas Independientes (Most) de Bozo Petrov, tercera fuerza más votada con 19 escaños. Petrov, convertido en el árbitro de la política nacional, se pasó varias semanas escuchando las ofertas de coalición que le hacían Milanovic y Karamarko.

El 22 de diciembre, cuando parecía que estaba a punto de ponerse de acuerdo con el SDP, Petrov sorprendió con el anuncio de que aceptaba ser el socio de la HDZ, formación con la que las distancias ideológicas eran menores. Al preacuerdo se apuntaron Milan Bandic 365-Partido del Trabajo y la Solidaridad, la agrupación populista animada por el alcalde de Zagreb, Milan Bandic, y un diputado independiente, lo que daba a la oposición una exigua mayoría absoluta de 78 escaños, dos más del mínimo requerido. Ahora bien, para asegurar la investidura del Gobierno del centro-derecha, ya que la sola convergencia de la HDZ y el Most no alcanzaba el requisito de la mitad más uno (76) por un escaño, Karamarko acató la exigencia de Petrov de que él no fuera el primer ministro; el puesto tendría que ser para una personalidad capaz de generar un sólido consenso.

Las negociaciones desembocaron a las pocas horas en un acuerdo para presentar la candidatura de Oreskovic, un directivo empresarial croato-canadiense con la doble nacionalidad y desconocido por el público que aportaba un perfil estrictamente técnico, adecuado, insistía el Most, para pilotar la salida de la larguísima crisis económica que padecía el país (tras seis años seguidos de recesión, un registro que recordaba al de Grecia, Croacia se disponía a terminar 2015 con un tímido crecimiento positivo), y en principio no controversial.

El 23 de diciembre la presidenta de la República, Kolinda Grabar-Kitarovic, recibió del bipartito de centro-derecha seguridades de que Oreskovic contaba con los respaldos parlamentarios necesarios para ser investido primer ministro, como mínimo por 78 votos sobre 151. La jefa del Estado designó al directivo empresarial ese mismo día. El 22 de enero de 2016, finalmente, Oreskovic fue investido por el Sabor o Parlamento con una mayoría más holgada de lo esperado, 83 votos, frente a 61 en contra. En el nuevo Gobierno de coalición la HDZ contaba con 12 ministros y el Most con seis, aunque también tenían cabida cinco independientes. Karamarko y Petrov tomaron sendos puestos de viceprimer ministro. Las carteras principales fueron repartidas como sigue: Exteriores, para Miro Kovac (HDZ); Interior, para Vlaho Orepic (Most); Defensa, para Josip Buljevic (HDZ); Justicia, para Ante Sprlje (Most); Economía, para Tomislav Panenic (Most); y Finanzas, para el independiente Zdravko Maric, quien acometía la tarea de meter en cintura el déficit y la deuda pública, situados por encima del 5% y el 80% del PIB, respectivamente.

El programa del nuevo Gobierno se fijó como metas concretas conseguir un crecimiento anual del 3%, reducir la deuda a menos del 80% para 2020, constreñir el déficit por debajo del tope europeo del 3%, incrementar las exportaciones un 30% y recortar el paro desde el 16,6% actual, la tercera tasa más elevadas de la UE después de Grecia y España, al 14% al final de la legislatura. En un plano más genérico quedaron los propósitos de mejorar los estándares de vida de la población, reformar la sanidad y la educación, ganar en eficiencia energética y en competitividad, y estimular la industria del turismo.

Oreskovic, primer jefe de Gobierno croata que no pertenecía al HDZ o el SDP en un cuarto de siglo de Estado independiente, indicó su disposición a enfrentar los "desafíos" que afectaban al país, entre los que se incluía también la crisis de los cientos de miles de refugiados de Oriente Medio en tránsito hacia Alemania a través de Croacia, ruta de paso occidental surgida después de cortarse el ramal serbo-húngaro, lo que podría requerir la adopción de "decisiones difíciles". La voluntad de las autoridades de Zagreb seguía siendo la de permitir el paso de los refugiados arribados a Grecia desde Turquía que querían llegar a Alemania por Croacia, Eslovenia y Austria, y para ello continuaría la política de consultas y colaboración con los socios vecinos y con la UE.

Tihomir Oreskovic está casado con Sanja Dujmovic. La pareja ha tenido cuatro hijos, dos chicos y dos chicas.

(Cobertura informativa hasta 25/1/2016)