John Atta Mills
Presidente de la República (2009-2012)
En enero de 2009, en la persona de John Atta Mills, ha regresado al poder en Ghana, ocho años después de perderlo, el Congreso Nacional Democrático (NDC), el partido fundado y todavía liderado por el antiguo presidente Jerry Rawlings, a la sazón preceptor político de este antiguo profesor de Derecho. La victoria de Mills en las presidenciales de 2008, tras dos intentos fallidos en 2000 y 2004 frente al ahora sucedido John Kufuor, consolida a Ghana, antaño un país maleado por los golpes de Estado y las dictaduras militares, como un modelo de estabilidad, buen gobierno y democracia en el África negra, y donde el turnismo bipartidista funciona sin sobresaltos. Con un mandato inicial de cuatro años, Mills se propone pisar el acelerador en el progreso económico y la mejora de la calidad de vida de este país todavía de desarrollo medio-bajo, que aguarda expectante la explotación de su recién descubierta riqueza petrolera.
(Texto actualizado hasta enero 2009)
1. Profesor de Derecho y legatario de Jerry Rawlings
2. Triunfo en las presidenciales 2008 al tercer intento
1. Profesor de Derecho y legatario de Jerry Rawlings
Miembro del grupo étnico fante e hijo de maestros de escuela rurales, en 1963 se sacó el bachillerato en la Escuela Achimota, selecto colegio de secundaria, al norte de Accra, que tradicionalmente ha formado a las élites dirigentes ghanesas, y en 1967 se graduó en Derecho con el título de Bachelor’s Degree por la Universidad de Ghana. Puesto que disponía de recursos económicos, optó por enriquecer su currículum académico, para lo que marchó al Reino Unido, la antigua metrópoli colonial. En 1968 recibió la licenciatura superior en la prestigiosa Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres (LSE) y tres años después se sacó el doctorado en la Escuela de Estudios Orientales y Africanos (SOAS) de la Universidad de la capital británica, con una tesis sobre desarrollo económico y política fiscal. A continuación, disfrutó por unos meses de una beca Fulbright en la Escuela de Derecho de la Universidad de Stanford, en California, Estados Unidos. Entre medio, ejerció por poco tiempo la abogacía en un bufete de asociados en Accra.
Convertido en uno de los ghaneses mejor formados de su generación y en toda una autoridad en Derecho Tributario, Mills se asentó definitivamente en su país en 1971, dispuesto a dedicar su vida a la profesión docente en su alma máter, el campus de la Universidad de Ghana en Legon, cerca de Accra.Una vocación de servicio a la comunidad que le mantuvo completamente al margen de la actividad política, en unos años en que la antigua colonia británica de Costa de Oro, pionera en el movimiento de emancipación del África negra con su independencia en 1957, se desgarraba en una sucesión de golpes de Estado militares que abortaban las tentativas de democracia y hundían al país en el subdesarrollo y la miseria.
La funesta secuencia de intromisiones castrenses había comenzado en 1966 con el derrocamiento del primer presidente y artífice de la independencia nacional, Kwame Nkrumah, y tras la repatriación de Mills siguió su curso con los golpes del teniente coronel Ignatius Acheampong en 1972 y del teniente general Frederick Akuffo en 1978. En junio de 1979, recién retornado de una estancia académica en Filadelfia, Mills continuaba dando clases en la Facultad de Derecho cuando tuvo lugar el golpe de Estado que condujo al poder a una junta presidida por el teniente del Aire Jerry Rawlings, un oficial nacionalista de tendencias radicales que tras mandar fusilar a sus predecesores de uniforme orquestó un rápido proceso de retorno al Gobierno civil, el cual sólo duró dos años: el último día de 1981, el propio Rawlings, tras acusar al presidente salido de las elecciones que él mismo había convocado, Hilla Limann, de no hacer nada para reactivar la economía y erradicar la corrupción, volvió a usurpar el poder e implantó una dictadura con un programa revolucionario de corte socialista para reactivar la economía y avanzar en el desarrollo nacional.
En 1986, mientras Rawlings, en un drástico viraje de su política, intentaba sacar adelante una dura reforma estructural de la economía de signo neoliberal, Mills complementó sus quehaceres docentes con un cometido en la administración del Estado, el de comisionado en funciones del Servicio de Recaudación Fiscal. Adquirió la titularidad en la jefatura de esta oficina económica en 1993, el año en que Rawlings, luego de conducir desde arriba una transición democrática que pasó por la aprobación en referéndum de una nueva Constitución, la legalización de los partidos y la celebración de elecciones generales que fueron ganadas por el oficialismo, se instaló como presidente civil de la llamada Cuarta República de Ghana.
En los primeros años de la restauración democrática, Mills estuvo vinculado al Partido Popular Democrático (DPP), pequeña formación identificada con el pensamiento y la obra de Nkrumah y que en las presidenciales del 3 de noviembre de 1992 apoyó la candidatura de Rawlings en el seno de la Alianza Progresista. Posteriormente se orilló al partido de Rawlings, el Congreso Nacional Democrático (NDC), que ostentaba la más amplia mayoría absoluta en el Parlamento. Su labor en el Servicio de Recaudación Fiscal debió impresionar a Rawlings, que no sólo le incluyó en su círculo personal sino que le designó su compañero de fórmula para las elecciones del 7 de diciembre de 1996 como candidato a vicepresidente de la República. La nueva victoria del oficialismo convirtió al hasta entonces medio anónimo funcionario del Estado en la segunda persona del Ejecutivo ghanés.
El 7 de enero de 1997 Mills inauguró su alto mandato institucional y apenas año y medio después, el 6 de junio de 1998, fue desvelado por Rawlings como su favorito para sucederle tras las elecciones de 2000, a las que él no podía presentarse por limitación constitucional. La jefatura del partido sería transferida a Mills también entonces. El anuncio cerró las especulaciones sobre la aspiración sucesoria de la esposa del jefe del Estado, Nana Konadu Agyeman-Rawlings. Pero por otro lado provocó estupor y halló resistencia en el NDC, donde miembros de la vieja guardia, algunos de ellos ambiciosos de la candidatura para ellos mismos, dudaban de la cualificación del antiguo profesor universitario, cuyo perfil, aunque docto y probo, parecía bastante plano y gris, con escaso fuste político, si bien él se declaraba socialdemócrata y simpatizante del pensamiento de Nkrumah.
Ciertamente, por temperamento y por trayectoria vital, el calmoso y amable vicepresidente de la República podía pasar por la antítesis de su superior institucional, Rawlings, aunque también era cierto que el otrora impetuoso, marcial y hasta implacable oficial de Aviación se había moderado mucho con los años. La designación de Mills, cubierto de encendidos elogios por su mentor político tres años más joven, puso a prueba la autoridad y el carisma de Rawlings entre sus lugartenientes partidistas. En diciembre de 1998 el IV Congreso Nacional del NDC rehusó endosar la candidatura del inesperado delfín, y la cuestión permaneció en suspenso a lo largo de 1999. Finalmente, el 29 de abril de 2000, un congreso extraordinario celebrado en la ciudad de Ho, acusando recibo de las presiones ejercidas por Rawlings y de las movilizaciones de respaldo a Mills por los movimientos de base llamados a sí mismos nkrumahistas, proclamó la postulación del experto fiscal. Sin embargo, el envite presidencial fracasó.
El 7 de diciembre de 2000, el líder opositor John Kufuor, del Nuevo Partido Patriótico (NPP), quien ya se había enfrentado con Rawlings cuatro años atrás, le sacó cuatro puntos de ventaja a Mills, que obtuvo el 44,8% de los votos. Se hizo necesaria una segunda vuelta el 28 de diciembre y esta vez, Kufuor, apoyado por los cinco postulantes eliminados en la primera ronda, certificó su victoria sobre su adversario con el 57,4% de los sufragios. En un caso de elegancia democrática no frecuente en las lides electorales africanas, tanto Mills como Rawlings reconocieron su derrota sin rechistar, tal que el 7 de enero de 2001 entregaron sus despachos institucionales a los titulares de la nueva Administración.
2. Triunfo en las presidenciales 2008 al tercer intento
Contrariamente a lo anunciado anteriormente, Rawlings retuvo la presidencia del NDC, ya con carácter vitalicio por decisión del partido. Pero no por ello dejó de apostar por The Prof, como Mills era apodado. El 21 de diciembre de 2002, de regreso de una visita académica a la Universidad de la Columbia Británica en Canadá, el ex vicepresidente volvió a merecer la confianza del NDC, reunido en asamblea extraordinaria, para representarle en las próximas elecciones presidenciales
Tampoco en esta ocasión consiguió imponerse a Kufuor, que optaba a la reelección y cuyo programa, centrado en la prosecución de las reformas económicas que tan buenos resultados estaban dando, intentó contrarrestar con la denuncia de los todavía elevados niveles de pobreza y subdesarrollo humano, de cuya reducción se erigió en paladín. El mensaje social, no exento de populismo, no funcionó: el 7 de diciembre de 2004 el opositor, con la misma cuota de votos que en 2000, fue batido por el oficialista, que alcanzó el 52,4% y se ahorró la segunda vuelta. Mills perdió en Accra y además sufrió una humillante derrota en su patria chica, la Western Region, donde perdió por 19 puntos, y también en la circunscripción natal, Tarkwa-Nsuaem, donde Kufuor le sacó nada menos que 42 puntos de ventaja.
A pesar de todo, Mills fue proclamado por tercera vez consecutiva candidato presidencial del NDC el 21 de diciembre de 2006 como resultado de la elección congresual efectuada por 1.720 delegados. En esta ocasión, Mills se impuso con el 81,4% de los votos a otros tres precandidatos, el funcionario internacional Ekwow Spio-Garbrah, jefe de la Organización de Telecomunicaciones de la Commonwealth (CTO), el ex asesor presidencial Alhaji Mahama Iddrisu y el magnate de los negocios Eddie Annan. El antiguo partido gobernante confiaba en que a la tercera, ahora que el potente Kufuor, uno de los estadistas del África negra más respetados y mejor relacionados con las potencias occidentales, se retiraba al completar su segundo mandato, sería la vencida. Su contrincante del NPP en 2008 iba a ser el abogado Nana Akufo-Addo, hasta ahora ministro de Exteriores.
Con el eslogan de Un hombre mejor para una Ghana mejor, Mills presentó un manifiesto electoral que instaba a hacer las inversiones y esfuerzos necesarios para asegurar el crecimiento económico sostenido del futuro, única vía para generar riqueza y distribuirla socialmente, avanzar en el desarrollo y convertir a Ghana en "la nación líder de África en este siglo". Robustecer la tesorería nacional, invertir en proyectos estratégicos, mejorar los servicios públicos, modernizar las infraestructuras, apostar por las tecnologías de la información, impulsar la educación y la sanidad, atender las necesidades del agro –en particular el sector del cacao, segunda exportación nacional después del oro, de los que Ghana es respectivamente el segundo productor mundial y el primero de África- y apoyar el sector privado eran algunos de los puntos clave del programa del aspirante del NDC. No podían faltar las promesas de reducir la pobreza y de hacer realidad el sueño, en la mente de todos a raíz de los recientes hallazgos de vastas reservas del hidrocarburo en la plataforma costera, de convertir a Ghana en un exportador de petróleo tan pronto como en 2010.
Mills y Akufo-Addo llegaron bastante emparejados en los sondeos al día de las votaciones, el 7 de diciembre de 2008. El escrutinio concluyó que el candidato del Gobierno había sido el más votado con el 49,1%, pero seguido muy de cerca por el opositor con el 47,9%. Por los pelos, Mills recibió una segunda oportunidad para disputarle la Presidencia a Akufo-Addo en una segunda vuelta, de la que quedaron apeados otros seis aspirantes. La participación fue alta, del 69,5%. La ronda definitiva tuvo lugar el 28 de diciembre, con una participación aumentada al 72,9%, y se reveló más reñida aún y más tensa que la primera. Mills se puso en cabeza por escasísimo margen, pero la Comisión Electoral demoró la certificación de su victoria porque problemas logísticos, mezclados con denuncias de irregularidades aventadas por los dos partidos, hicieron necesario repetir la votación en el distrito de Tain, en la Región de Brong Ahafo, el 2 de enero de 2009.
Ventilado el expediente electoral en esta circunscripción con el boicot del NPP –una postura chocante, ya que se trataba del partido en el poder- tras rechazar los tribunales su demanda de aplazamiento de la votación, la Comisión Electoral proclamó a Mills presidente electo el 3 de enero con el ajustado porcentaje del 50,2%. El equipo de monitorización de la Unión Africana validó el proceso electoral, y tanto los observadores internacionales como los locales calificaron las votaciones de, en líneas generales, transparentes, limpias y democráticas. Las protestas de los enfadados seguidores del NPP evocaron el fantasma de un escenario de sangrientos disturbios poselectorales como los sucedidos un año antes en Kenya, pero los conatos de violencia no pasaron de ahí. En las legislativas, el NDC recuperó la condición de primera fuerza parlamentaria con 114 diputados sobre 228 escaños adjudicados, seguido por el NPP con 107; se trataba, por tanto, de una mayoría muy delgada. El 7 de enero Mills tomó posesión de la Presidencia de la República con un mandato inicial de cuatro años.
John Atta Mills está casado con Ernestina Naadu, una asesora matrimonial y educadora que trabaja con el Servicio de Educación de Ghana (GES), y es padre de un hijo. Su biografía oficial le presenta como un gran aficionado al deporte, particularmente el hockey, especialidad de cuyo equipo nacional fue jugador en su juventud y que dejó de practicar cuando cumplió los 50, sustituyéndola entonces por la natación.
(Cobertura informativa hasta 1/2/2009)