Carme Colomina: “La gran pregunta de este 2024 es hasta qué punto este será un año de resistencia democrática o veremos cómo se profundiza la erosión"

Termina el año con guerras sin fin a la vista y una polarización política cada vez más profunda. 2023 no será fácil de olvidar: la crisis humanitaria provocada por la ofensiva de Israel en Gaza es la última catástrofe en un mundo ya cansado del sangriento estancamiento en que se ha convertido la invasión rusa en Ucrania. Lo más probable es que en 2024 el tablero geopolítico sufra nuevos temblores. Lo analiza Carme Colomina, investigadora sénior de CIDOB y coordinadora del informe elaborado por esta organización sobre los temas que marcaran la agenda internacional en 2024. “Estamos en un año casi sin precedentes por la cantidad de países que van a ir a las urnas, pero también es un año donde veremos como estos dos grandes procesos que estructuran las relaciones internacionales, los procesos electorales y los conflictos, se entrecruzan entre ellos”, explica Colomina. “Veremos como unas elecciones tan importantes como las de EEUU pueden influir en conflictos, en la geopolítica, pero también veremos como a pesar de tanta profusión electoral eso no significa que haya una mayor y mejor democracia. La gran pregunta de este 2024 es hasta qué punto este será un año de resistencia democrática, o, al contrario, veremos cómo se profundiza en la erosión de los sistemas democráticos”, afirma la investigadora. 

Acceder a la información