Las elecciones brasileñas penden de la economía
Rousseff promete más renta y empleo y Silva quiere dar autonomía al banco central. Para Fabricio Borges Carrijo, investigador analista de CIDOB, el mantenimiento de las ayudas sociales, elemento fundamental del programa de Rousseff como lo fue del de Lula da Silva –Mia Casa, Mia Vida permitió el acceso a la vivienda a la población más pobre–, es viable y necesario. El reto es conseguir los recursos públicos que las hagan posible. Según Borges, hace falta empleo y servicios públicos de calidad. “Por sus condiciones de vida, nivel de estudios, renta… Más que clase media, en Brasil existe un nuevo proletariado” que exige mejoras “para ser una clase media efectiva, con mayores recursos, más acceso a la educación y al capital cultural, a la sanidad y al transporte”.