El sur del Líbano, una región preparada para la invasión israelí en la que Hezbolá "podría forzar una guerra de guerrillas"
Las hostilidades entre Israel y la milicia del partido chií libanés Hezbolá cumplirán un año el próximo 8 de octubre, aunque ha sido desde la semana pasada cuando la situación ha llegado a un punto límite, especialmente entre este viernes y sábado, cuando un ataque israelí ha acabado con la vida del líder militar y espiritual de la milicia libanesa, Hasán Nasralá. Conocer las capacidades operativas actuales de Hezbolá es complicado tras lo ocurrido desde la semana pasada, reconoce Moussa Bourekba, investigador principal de CIDOB (Barcelona Centre for International Affairs). Al estar arraigado en territorio libanés desde hace más de cuatro décadas, evidentemente Hezbolá "tiene un conocimiento del terreno que Israel no tiene" y desde la última guerra del 2006 ha ido acumulando material militar, incluso de precisión. Con todo, Hezbolá es consciente de que "es un conflicto asimétrico que le enfrenta al ejército más potente en la región", por lo que "la cuestión no es qué actor puede conseguir una victoria decisiva": "Yo creo que ninguno de los dos, porque la historia nos ha demostrado que todos los enfrentamientos entre actores estatales y grupos armados no se han saldado por una victoria", afirma.