Matti Vanhanen

Militante del partido de Centro (Keskusta), entre 1980 y 1983 presidió la Asociación de Juventudes centristas mientras profesionalmente se ganaba la vida como redactor de prensa.A caballo entre el activismo político y la profesión periodística, en 1981 accedió al Consejo municipal de Espoo y en enero de 1982 tuvo la oportunidad de integrar el Colegio Electoral restringido que eligió al socialdemócrata Mauno Koivisto presidente de la República, si bien él, obviamente, votó por el aspirante de su partido, el veterano estadista Johannes Virolainen, primer ministro en 1964-1966 y presidente de la formación en 1965-1980. De acuerdo con el sistema entonces vigente, los 301 miembros del Colegio Electoral primero eran elegidos por sufragio universal y luego a su vez elegían al presidente de la República en votación cerrada.

En 1985 Vanhanen entró en el consejo editorial del periódico Kehäsanomat y tres años después se puso al frente de esta cabecera informativa, labor que desde 1987 pasó a simultanear con la presidencia del Consejo Nacional de la Juventud. En 1989 se sacó la licenciatura universitaria en Ciencias Sociales y fue elegido concejal en el ayuntamiento de Nurmijärvi.

En las elecciones legislativas del 17 de marzo de 1991, que supusieron para el Keskusta los mejores resultados de su historia con el 24,8% de los votos y 55 escaños, lo que dio derecho al jefe del partido, Esko Aho, a encabezar el nuevo Ejecutivo de coalición, cosa que hizo desde el 26 de abril, Vanhanen obtuvo el mandato de diputado, por la circunscripción de Uusimaa, que luego iba a renovar en todas las convocatorias electorales (marzo de 1995, marzo de 1999 y marzo de 2003) hasta el presente. En los cuatro años siguientes a su debut como legislador, Vanhanen desarrolló su labor en el bloque gubernamental del Eduskunta o Parlamento, y a partir de su segunda legislatura, en abril de 1995, en la bancada de la oposición, puesto que los comicios de aquel año fueron ganados por el Partido Socialdemócrata (SDP) de Paavo Lipponen, quien reemplazó a Aho en la jefatura del Gobierno.

Un año antes de esta mudanza, el 19 de abril de 1994, Vanhanen fue elegido por sus compañeros vicepresidente del grupo de diputados centrista. Para entonces se había destacado en los comités parlamentarios de Medio Ambiente, Asuntos Exteriores y Asuntos Europeos, área ésta última en la que se convirtió en un experto, que no en un entusiasta europeísta, en vísperas del ingreso de Finlandia en la Unión Europea (UE). Adicionalmente, en 1997 se convirtió en miembro del Consejo Regional de Uusimaa y en 1998 pasó a presidir otra dos de las innumerables entidades asociativas finlandesas, la Unión por la Educación Rural y la Fundación de la Vivienda para la Juventud, de la que venía fungiendo de vicepresidente desde hacía 17 años.

El 18 de junio de 2000 Vanhanen fue elegido uno de los dos vicepresidentes del Keskusta en la convención bianual del partido, que registró la baja temporal de Aho como presidente de la formación y su relevo por la diputada y ex ministra de Justicia Anneli Jäätteenmäki. Aho retornó al puesto en junio de 2001, pero en enero de 2002 anunció que iba a presentar la renuncia definitiva en el próximo congreso del Keskusta. Durante algunos meses Vanhanen apareció como un competidor potencial por la sucesión y por tanto rival de Jäätteenmäki, quien encabezaba los sondeos de popularidad, si bien finalmente no se presentó a la liza interna del 15 de junio de 2002, de la cual salió revalidado como uno de los tres vicepresidentes del partido.

Político sin carisma en un país que, por otro lado, se enorgullece de su cultura democrática sosegada, donde el fair play y la tradición del consenso hacen poco tolerables las manifestaciones deshonestas o demagógicas, y donde la corrupción política es excepcional (según concluye la organización Transparency International, que endosa a la Finlandia la mejor puntuación mundial en su índice de percepción de corrupción), Vanhanen era conocido sobre todo por su oposición absoluta a la energía nuclear y, como se apuntó arriba, sus planteamientos críticos con la UE, hasta el punto de ser incluido en el bando de los euroescépticos.

Siendo uno de los 30 representantes aportados por los parlamentos nacionales de los estados miembros a la Convención Europea, también conocida como Convención sobre el Futuro de Europa, que arrancó el 28 de febrero de 2002 con el encargo por el Consejo Europeo de elaborar un proyecto de Constitución Europea que recogiera la reforma de las instituciones y los tratados de la UE, Vanhanen fue coimpulsor de varias enmiendas presentadas por los representantes finlandeses a las propuestas del Presidium de la Convención, presidido por el estadista francés Valéry Giscard d’Estaing, que tendían a incrementar el peso de los gobiernos en la futura UE a costa de la Comisión y el Parlamento, y que en su mayoría terminaron siendo incluidas en el texto final.

Por ejemplo, Vanhanen rechazó la creación del puesto de presidente del Consejo Europeo, que iba a hacer innecesario el sistema de presidencias rotatorias semestrales de los estados miembros. Pero tras estas críticas no existía una frustración por la supeditación en la UE del federalismo y el elemento supranacional a lo intergubernamental —antes, al contrario—, sino el temor a que los estados grandes, con Alemania y Francia a la cabeza, incrementaran su peso en la toma de decisiones a costa de los estados pequeños y periféricos, entre los que se encontraba el país nórdico.

En las elecciones generales del 16 de marzo de 2003 el Keskusta le ganó la partida al SDP y, con el 24,7% de los sufragios y 55 escaños, recuperó la condición perdida en 1991 del partido más votado y por ende el derecho a intentar formar gobierno en primer lugar. Luego de alcanzar un acuerdo para una coalición de mayoría con el SDP y el Partido Popular Sueco (SFP), el 17 de abril Jäätteenmäki tomó posesión al frente de un gabinete que incluía como ministro de Defensa a Vanhanen, quien por tal razón cesó de membresía en la Convención Europea.

A las pocas semanas de estrenarse en la oficina gubernamental, Vanhanen suscitó una polémica nacional por su anuncio de que el Ejército finlandés se reservaba mantener su arsenal de minas antipersonal más allá de 2010, contraviniendo el compromiso adquirido por la administración de Lipponen ante los socios de la UE, siendo Finlandia el único estado miembro que no ha suscrito el Tratado de Ottawa sobre la prohibición del uso y la producción de esta categoría de armamento terrestre. Vanhanen argumentaba que por el momento no había recursos presupuestarios para sufragar la sustitución de las minas antipersonal por otros sistemas defensivos sin poner en peligro la doctrina de seguridad nacional.

Ahora bien, la controversia sobre las minas fue opacada por otro asunto que alcanzó la categoría de escándalo político y que envolvió a la primera ministra. Después de haberlo negado, se descubrió que Jäätteenmäki había solicitado durante la campaña electoral unos documentos confidenciales del Ministerio de Exteriores, dando lugar por tanto a una filtración irregular, que desvelaban la participación de funcionarios del Gobierno en una reunión con representantes de Estados Unidos para estudiar la posible participación de Finlandia, con ayuda humanitaria y tropas de paz, en la reconstrucción del Irak de posguerra.

Toda vez que el Keskusta se oponía tajantemente a la invasión angloestadounidense de Irak, Jäätteenmäki se había servido de esas informaciones para denunciar contradicciones en la política exterior del primer ministro socialdemócrata, quien oficialmente mantenía la línea tradicional de neutralidad en los conflictos internacionales. Los análisis poselectorales indicaban que la revelación de aquellas iniciativas secretas del Ministerio de Exteriores había sido fundamental en la victoria por la mínima de los centristas en los comicios.

Jäätteenmäki no tuvo otra salida, el 18 de junio, que la dimisión. Con carácter funcional se hizo cargo de la jefatura del Ejecutivo el viceprimer ministro y ministro de Finanzas del SDP, Antti, Kalliomäki, hasta que el Keskusta designara al sucesor de Jäätteenmäki. El SDP y el SFP informaron que la mudanza no iba a afectar a la coalición tripartita del Gobierno. El candidato natural a los ojos de la mayoría era Vanhanen, y el 24 de junio se ventiló todo el procedimiento institucional con su designación formal por la presidenta Tarja Halonen, su investidura en el Eduskunta con 109 votos a favor y 76 en contra, y, acto seguido, su entrada en funciones. El mismo día, además, Jäätteenmäki resignó también como presidente del Keskusta, y Vanhanen se erigió en su seguro sucesor, si bien este relevo quedó pospuesto hasta un congreso extraordinario del partido a celebrar en el mes de octubre.

(Nota de edición: esta biografía fue publicada el 7/7/2003. Tras las elecciones legislativas del 18/3/2007, en las que el Partido de Centro retuvo el primer puesto, Matti Vanhanen formó un segundo Gobierno con el Partido de la Coalición Nacional, el Partido Popular Sueco y la Liga Verde. El 12/6/2010 cedió el liderazgo del Partido de Centro a Mari Kiviniemi, quien diez días después le sustituyó también en el puesto de primer ministro. Posteriormente, Vanhanen fue viceprimer ministro y ministro de Finanzas entre 2020-2021 en el Gobierno de coalición de la socialdemócrata Sanna Marin, así como dos veces presidente del Parlamento, en 2019-2020 y 2022-2023. En 2018 fue además candidato en las elecciones a presidente de la República, quedando en quinto lugar).