Jakov Milatovic

El triunfo del ex ministro de Economía Jakov Milatovic, con poco más de dos años de experiencia política, en el balotaje presidencial de abril de 2023 en Montenegro pasa una hoja en la historia reciente de la nación balcánica. Milatovic fuerza la salida del Ejecutivo de Milo Djukanovic, el duradero primer líder del Estado independiente, cuyo partido, el Democrático de los Socialistas de Montenegro (DPS), ya fue desalojado del Gobierno en 2020 y quien hoy encaja su primera derrota en una votación para la jefatura del Estado tras siete victorias consecutivas. Además, la irrupción de Milatovic, número dos del partido centrista social-liberal ¡Europa Ahora!, añade un nuevo actor de peso al volátil y confuso panorama político montenegrino, donde cinco grupos partidarios vienen librando un forcejeo que está repercutiendo seriamente en la gobernabilidad, con unas atribuidas interferencias rusas y la guerra de Ucrania como perturbadores telones de fondo. El mandatario electo ha dejado claro su apoyo a las sanciones de la UE a Rusia, que incluyó a Montenegro en su lista de Estados hostiles.

En estos momentos, Montenegro dispone de un Gabinete dimisionario en funciones, el del primer ministro Dritan Abazovic, y encara unas elecciones legislativas anticipadas el 11 de junio. Previamente, el 20 de mayo, Djukanovic será relevado en la Presidencia por Milatovic, quien promete fluidez en unas instituciones democráticas debilitadas por las pugnas, un combate frontal contra la corrupción y el crimen organizado (inveterada asignatura pendiente) y avances reformistas decisivos para lograr el ingreso en la UE en el horizonte de 2028, después de 16 años de negociaciones, a más tardar. Montenegro tiene provisionalmente cerrados tres de sus 33 capítulos de negociación, los de investigación y ciencia, educación y cultura y relaciones exteriores; en la mayoría de los capítulos restantes, 22, su nivel de preparación es limitado o escaso.

Tras la disolución en 2006 de la unión estatal con Serbia, breve continuadora en 2003 de la extinta República Federal de Yugoslavia, Podgorica y Belgrado siguieron caminos diferentes: si bien ambas llamaron a la puerta de la UE, la primera se propuso además entrar en la OTAN, empresa que realizó en 2017. Por otra parte, ya en 2002 el pequeño país mediterráneo, que basa en el turismo la cuarta parte de su PIB, adoptó unilateralmente el euro como su moneda de facto. A diferencia de Djukanovic y en sintonía con Abazovic, Milatovic desea mejorar las relaciones con Serbia y propiciar un equilibrio positivo entre la defensa de la identidad nacional montenegrina y la comprensión de quienes, siendo ciudadanos de un Estado soberano, se consideran serbios.

Montenegro es una república parlamentaria y las atribuciones del presidente son de tipo ceremonial. Sin embargo, Djukanovic, al conservar el liderazgo del DPS, primera fuerza legislativa aún pese a su declive, jugó a ser un presidente radicalmente político, exprimiendo sus capacidades constitucionales e incluso rebasándolas, con las consiguientes polémicas y conflictos. Ahora, está por ver a qué rol se acomodará su sucesor Milatovic, cuya novísima formación, presidida por Milojko Spajic, carece por el momento de representación en el Skupstina.


(Texto actualizado hasta 11 abril 2023)

A sus 36 años, Jakov Milatovic, en cuanto a precocidad institucional, sigue la senda de su antagonista en las urnas, el hasta ahora incombustible Milo Djukanovic, desde los 29 ininterrumpidamente en la cúpula del poder de una u otra manera, con un total de 16 años como primer ministro (distribuidos en cuatro ejercicios), nueve como presidente de la República (dos períodos) y 25 de líder del DPS. Otros puntos en común son su formación como economistas, su orientación intensamente proeuropea y cierto elemento populista —tantas veces manifiesto en el estilo del mandatario saliente y ya insinuado en su discurso de campaña por el titular entrante—, si bien el 24 años más joven Milatovic dice representar una forma radicalmente nueva, sin concepciones patrimonialistas e intolerante con la corrupción, de hacer política.

Titulado por la Universidad de Montenegro (2010) y el St John's College de la Universidad de Oxford (2013), Milatovic ofrece un currículum de experto en cuestiones económicas, finanzas públicas y corporativas, administración de empresas y negocios. Además de la licenciatura y la maestría obtenidas en las citadas casas de estudios, asistió a cursos y programas de intercambio con beca en las universidades de Illinois, Viena, La Sapienza de Roma y Beijing. En 2011 empezó a trabajar en el sector privado, especializándose en análisis de riesgos de mercados. Durante exactamente una década ejerció profesionalmente en las plantillas del banco montenegrino NLB (filial del grupo financiero esloveno homónimo), la sede del Deutsche Bank en Frankfurt y, desde 2014, las oficinas en Londres, Podgorica y Bucarest del Banco Europeo para la Reconstrucción y Desarrollo (BERD).

A principios de diciembre de 2020 Milatovic se disponía a cumplir dos años de servicios como economista principal del BERD en la capital rumana cuando aceptó ser el ministro de Desarrollo Económico del nuevo Gobierno, eminentemente tecnocrático, del ingeniero Zdravko Krivokapic, designado al frente de una heteróclita coalición de partidos opositores al DPS y sus aliados.

El debutante en política formaba parte de la cuota de ministros reservada al Frente Democrático (DF), coalición conservadora que incorporaba a las corrientes proserbias y que, en compañía del Partido Popular Socialista (SNP) y llevando a Krivokapic de cabeza de lista, había obtenido un potente segundo puesto en las elecciones legislativas del 30 de agosto; este resultado había imposibilitado la continuidad del Gobierno del DPS, desde 2016 dirigido por uno de los lugartenientes del presidente Djukanovic, Dusko Markovic. Los bloques socios del DF eran La Paz es Nuestra Nación (MNN) y Acción de Reforma Unida (URA), dos nuevas opciones del centro liberal proeuropeo.

En diciembre de 2021 Milatovic y su colega del Ministerio de Finanzas y Bienestar Social, Milojko Spajic, presentaron el documento ¡Europa Ahora!, un memorándum o programa de reformas dirigido a la comunidad académica y centrado en la elevación del nivel de renta de los montenegrinos. En particular, Milatovic hacía hincapié en la subida del salario mínimo, la rebaja de las cotizaciones a la seguridad social, unos mayores beneficios fiscales para empresarios y autónomos, el afloramiento de la economía sumergida y la creación de oportunidades laborales para los jóvenes, evitando su emigración al extranjero.

La función ministerial de Milatovic no duró mucho. El 4 de febrero de 2022 el Gobierno Krivokapic sucumbió a una moción de censura parlamentaria lanzada por uno de sus propios sectores, la socio-liberal URA del viceprimer ministro y ministro de Seguridad Dritan Abazovic, resuelto a forzar la caída del Ejecutivo para constituir otro que según él estuviera más genuinamente comprometido con las reformas proeuropeas y la lucha contra las omnipresentes tramas corruptas y criminales. El 28 de abril el Skupstina o Parlamento aprobó el nuevo Gabinete Abazovic, que incorporaba a la URA, el SNP y otras seis formaciones menores. Pese a presentar las dos personalidades, casi de la misma edad, grandes similitudes en el discurso y un estilo, intelectual, universitario y cosmopolita, de lo más parecido, Abazovic no retuvo a Milatovic en su Gabinete, fiado para su sostén parlamentario al apoyo del DPS.

A cambio, Milatovic se propuso abrir su propio espacio en la ya abigarrada política nacional. El 26 de junio presentó el Movimiento ¡Europa Ahora! (PES!), que fundaba su manifiesto en el programa ministerial homónimo y que escogió a Milojko Spajic para presidirlo, reservándose Milatovic la posición de vicepresidente. La URA y la MNN eran identificados como potenciales socios de cooperación dada su cercanía ideológica, y en cambio se marcaban las distancias del DPS, el DF y el SNP, acusados de mantener vivas las lacras de la corrupción, el sectarismo y la demagogia. Para Milatovic, padre casado de tres hijos, la cuestión de la filiación comunitaria no era fundamental; aunque miembro bautizado de la Iglesia Ortodoxa Serbia, él se definía como un montenegrino étnico. En noviembre de 2022 reconoció ante los medios que en el referéndum de 2006 había votado en favor de la independencia nacional, entonces rechazada por el 44% de los electores participantes en la consulta.

El PES! hizo su debut electoral en las municipales del 23 de octubre de 2022 y dio la campanada en el municipio más importante, la capital Podgorica, lugar de residencia de un tercio de los algo más de 600.000 montenegrinos, donde con el 21,7% de los votos quedó segundo tras la lista multipartita del DPS. Milatovic, popular al haber contribuido a duplicar el salario mínimo (de los 222 a los 450 euros mensuales) y a empujar significativamente hacia arriba el salario promedio (desde los 530 a los 670 euros), se presentaba para alcalde, pero no consiguió batir al titular reeleccionista, Ivan Vukovic, hombre de confianza de Djukanovic. A continuación, en febrero de 2023, el ex ministro anunció su candidatura a la Presidencia de la República en las elecciones del 19 de marzo. Su postulación era una solución de recambio del PES!, ya que su candidato original, Spajic, fue vetado por la Comisión Electoral del Estado (DIK) con el argumento, negado por el interesado, de que mantenía en secreto la doble nacionalidad serbia y montenegrina.


ELECCIÓN DEL PRESIDENTE EN MEDIO DE LA PARÁLISIS INSTITUCIONALA Milatovic salieron a apoyarle una serie de partidos menores, algunos de ámbito únicamente local, entre ellos CIVIS, que formaba parte del Gabinete Abazovic. Inesperadamente, también pidió el voto para él el ex primer ministro Krivokapic. Milatovic iba a batirse contra seis adversarios. Además de Djukanovic, que agotaba su segundo mandato ganado en 2018, por el DPS, concurrían: Andrija Mandic, líder proserbio y prorruso del DF, apoyado desde fuera por el SNP; Aleksa Becic por Montenegro Democrático (DCG), principal integrante de la MNN, respaldado además por la URA de Abazovic; Draginja Vuksanovic por el Partido Social Demócrata (SDP); Goran Danilovic por Montenegro Unido (UCG); y el independiente Jovan Radulovic.

El caso era que para entonces, el Gobierno de Abazovic ya llevaba medio año en funciones y Montenegro arrastraba una crisis política de considerable gravedad. El 30 de agosto de 2022 el primer ministro, tomando la misma medicina que él había aplicado a Krivokapic tan solo siete meses atrás, fue descabalgado mediante una moción de censura presentada por el DPS, valedor parlamentario de escasa fiabilidad, y el SDP, miembro díscolo del Ejecutivo. Mantenido provisionalmente en el cargo, Abazovic solicitó al Skupstina la remoción de los ministros del SDP, lo cual fue aceptado por la Cámara el 21 de octubre.

Previamente, el 20 de septiembre, la URA, el SNP, el DF y DCG presentaron el nombre de Miodrag Lekic, antiguo dirigente del DF y actualmente líder de DEMOS (socio del DCG en la coalición MNN), como la persona encargada de recibir el mandato de formar un nuevo Gobierno, pero el presidente Djukanovic rechazó hacer la designación y a cambio llamó a convocar comicios anticipados, previa disolución del Skupstina. Dos días después, 41 de los 81 diputados firmaron una iniciativa para determinar si Djukanovic había violado la Constitución y por tanto debía ser destituido; el 30 de septiembre, el Parlamento rechazó el llamado presidencial para que se disolviera.

El 29 de diciembre el frente anti-Djukanovic volvió a la carga disponiendo la designación por el Parlamento (de nuevo, con 41 votos a favor) de Lekic para el puesto de primer ministro. Además, los partidos aliados sacaron adelante una reforma legal para obligar expresamente al presidente a designar jefe del Gobierno al candidato propuesto por el Skupstina y que dispusiera de los apoyos parlamentarios suficientes. El movimiento provocó encontronazos callejeros entre detractores y partidarios de Djukanovic, quien no dudó en rehusar el emplazamiento de los partidos contrarios, alegando errores de procedimiento y llegando a hablar de "intento de golpe constitucional". El 4 de enero de 2023, en estas circunstancias de bloqueo, Lekic comunicó que no le era posible formar gobierno. El 16 de marzo, a solo tres días para la elección presidencial, Djukanovic tramitó la disolución del Skupstina y anunció elecciones legislativas para el 11 de junio.

Así de caldeado estaba el ambiente político cuando los montenegrinos acudieron a votar a su presidente el 19 de marzo de 2023. Djukanovic se puso en cabeza con el 35,4%, seguido de Milatovic con el 28,9%. La segunda vuelta tuvo lugar el 2 de abril y el aspirante del PES!, receptor del voto útil de los partidarios de los eliminados Mandic y Becic (quienes se pronunciaron por él al igual que Abazovic), conquistó la Presidencia con el 58,9% de los sufragios. En un gesto de fair play, Djukanovic, presidente, primer ministro u hombre fuerte de Montenegro desde 1991, asumió su derrota y deseó éxito a su sucesor.

(Cobertura informativa hasta 11/4/2023)