Emil Boc

El equilibrado resultado de las elecciones legislativas disputadas en Rumanía en noviembre de 2008 alumbró un mes después un Gobierno de gran coalición, inédito en este país europeo, integrado por el conservador Partido Demócrata-Liberal (PD-L) y el izquierdista Partido Social Demócrata (PSD). El líder de la primera formación, Emil Boc, alcalde de Cluj-Napoca y político muy próximo al presidente de la República, Traian Basescu (a quien sucedió en la jefatura del PD-L), se ha convertido en primer ministro tras pilotar un profundo cambio doctrinal en su partido, que abandonó los postulados socialdemócratas, y con la misión de estabilizar una economía sacudida por las turbulencias financieras y asomada a la recesión.

(Texto actualizado hasta diciembre 2008)

1. Colaborador de Traian Basescu, alcalde de Cluj-Napoca y líder del PD-L
2. Primer ministro de recambio en 2008


1. Colaborador de Traian Basescu y alcalde de Cluj-Napoca y líder del PD-L

Formado en las facultades de Historia y Filosofía y de Derecho de la Universidad Babes-Bolyai de Cluj-Napoca (llamada simplemente Cluj hasta 1974), y con breves estancias en las universidades de Nottingham, Pittsburgh y Virginia para tomar clases de Psicología Social y Administración Pública, en 1996 empezó a ejercer la abogacía en la urbe transilvana y hasta 1999 continuó ampliando su formación gracias a becas en la Universidad Libre de Bruselas y la Universidad de Michigan. En 1994 contrajo matrimonio con Oana, una colega universitaria, con la que tuvo dos hijas. Miembro de la Asociación Rumana de Ciencias Políticas, en 2000 culminó su carrera académica con la obtención de sendos doctorados en Ciencias Políticas y Filosofía Política y en Derecho Constitucional por su alma máter.

Fue entonces cuando debutó en la profesión política representativa en las filas del Partido Demócrata (PD), formación de ideario socialdemócrata y proeuropeo que tenía su origen en la fracción del Frente de Salvación Nacional (FSN, el movimiento-partido aupado al poder en la revolución de diciembre de 1989 que derrocó la dictadura comunista de Nicolae Ceausescu) capitaneada por el ex primer ministro Petre Roman y de la que se había separado el grupo mayoritario leal a Ion Iliescu, líder supremo del FSN original y presidente de la República hasta 1996. Los demócratas, aliados a diversos partidos de centro y derecha, venían participando en los heterogéneos gobiernos de coalición que fueron sucediéndose desde aquel año, pero regresaron a la oposición como resultado de las elecciones generales de noviembre y diciembre de 2000, que devolvieron al poder al Partido Social Demócrata (PSD) de Iliescu y su lugarteniente Adrian Nastase, convertidos en presidente y primer ministro, respectivamente.

Boc empezó fungiendo de presidente del Buró Permanente del PD en Cluj antes de salir elegido en las urnas miembro de la Cámara de Diputados por la circunscripción número 13 del condado, el más populoso de la región de Transilvania y poseedor de una importante minoría magiar. El suyo fue uno de los 31 escaños obtenidos por el partido en la Cámara baja, frente a los 40 sacados en 1996.

En 2001, año en que desplazó a Roman en el mando del partido el antiguo capitán mercante y ministro de Transportes, y ahora alcalde de Bucarest, Traian Basescu, Boc fue elegido vicepresidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados y dos años después, el 24 de octubre de 2003, siendo ya miembro del Buró Permanente Nacional y vicepresidente orgánico, el PD le designó su presidente ejecutivo a instancias de Basescu, que deseaba liberarse de trabajo burocrático para concentrarse en la conducción política de la nueva alianza preelectoral, Justicia y Verdad (DA), forjada con el Partido Nacional Liberal (PNL) de Theodor Stolojan, quien fuera primer ministro entre 1991 y 1992. En diciembre, Boc asumió también el liderazgo del grupo parlamentario del PD en la Cámara baja.

Fiel escudero de Basescu en su fortísimo enfrentamiento político y personal con el primer ministro Nastase, Boc disputó como candidato a alcalde de Cluj-Napoca, segunda ciudad del país con 300.000 habitantes, las elecciones municipales del 6 de junio de 2004. En la primera vuelta, con el 33,1% de los votos, el demócrata fue superado por el postulante del Gobierno, el ministro del Interior Ioan Rus, pero en la segunda vuelta del 20 de junio se llevó la alcaldía con el 56,3% de los sufragios. El 12 de julio Boc tomó posesión del cargo con un mandato de cuatro años y en sustitución del nacionalista de derechas Gheorghe Funar, candidato reeleccionista apeado en la primera vuelta y que desde 1992 venía desarrollando una gestión caracterizada por el chovinismo antihúngaro.

Al mismo tiempo, en Bucarest, Basescu fue revalidado en su alcaldía capitalina, éxito que preludió su victoria en las elecciones presidenciales del 28 de noviembre y el 12 de noviembre. El 18 de diciembre, días antes de constituirse un Gobierno de coalición encabezado por la DA como resultado de las elecciones legislativas –en las que los aliancistas quedaron segundos tras el PSD con el 31,5% de los votos y 112 diputados, de los que 48 correspondían al PD-, Basescu tomó posesión de la jefatura del Estado rumano y, de acuerdo con el régimen constitucional de incompatibilidades, cesó como presidente y miembro del PD. Boc, número dos de la formación, se convirtió en presidente del PD en funciones hasta la Convención Nacional extraordinaria celebrada el 25 de junio de 2005, cuando los 4.000 delegados participantes le proclamaron sin oposición presidente titular y secundado, como nuevo presidente ejecutivo, por el reemplazo de Basescu en la alcaldía de Bucarest, Adriean Videanu.

La asamblea aprobó también prácticamente por unanimidad la nueva plataforma doctrinal elaborada por Boc: el ideario socialdemócrata era sustituido por unos planteamientos más centristas y liberales, genéricamente referidos como "populares", que abogaban por el conservadurismo fiscal, el rigor presupuestario y la lucha contra la corrupción. La mudanza ideológica era lo suficientemente importante como para requerir la baja en la Internacional Socialista, obtenida en tiempos de Roman, y solicitar el ingreso en el Partido Popular Europeo (PPE), un cambio de filiación verdaderamente inusual en el sistema de partidos europeo. En realidad, la derechización del PD ya venía siendo abogada de manera implícita por Basescu, al defender la introducción, ejecutada por el Gobierno el 1 de enero, del nuevo impuesto fijo del 16% sobre todas la rentas.

El viraje imprimido a su partido por Boc con la ostensible aquiescencia de Basescu fue recibido con estupor fuera del PD. El PNL, cuyo presente líder era el primer ministro Calin Popescu-Tariceanu, entendió que los demócratas invadían su nicho del espectro ideológico, controversia que se añadió a un fondo de divergencias, instigado por las malas relaciones entre Tariceanu y Basescu, que iba a terminar por liquidar a la DA. Desde la oposición, el PSD, encabezado por Mircea Geoana desde el mes de abril, consideró que el nuevo enfoque del PD, aunque censurable desde su punto de vista, objetivamente le beneficiaba, ya que podría atraer a sus filas a militantes descontentos con la línea liberal, además de que clarificaba la oferta ideológica del sistema de partidos rumano, donde el principal heredero del FSN quedaba convertido en la única gran referencia de la socialdemocracia y la izquierda.

Ignorando las acusaciones de estar haciendo política prácticamente como un portavoz de Basescu, Boc se acomodó en una postura crítica frente al que todavía era su socio de gobierno, Tariceanu. En junio de 2006 el jefe demócrata arremetió, al alimón con el presidente, contra la inesperada propuesta del primer ministro de retirar a los 700 soldados rumanos desplegados en Irak desde 2003, calificándola de "acto irresponsable". Las discordancias fueron a más y el 2 de abril de 2007 Tariceanu rehizo el Gabinete dando la carta de despido a los ministros del PD y quedándose con la Unión Democrática Magiar de Rumanía (UDMR) como único socio.

La ruptura de la AD precipitada por el dirigente liberal, que supuso el cese de la ministra de Justicia Monica Macovei, elogiada arquitecta de las reformas judiciales que habían permitido el ingreso del país en la UE el 1 de enero del año en curso, mereció muy duras calificaciones de Boc, el cual describió al nuevo Gobierno de minoría como un "gabinete ilegítimo con un primer ministro impostor que no representa la voluntad del electorado". "Tariceanu mintió, engañó y traicionó a millones de rumanos que votaron a la alianza", proclamó el irritado líder demócrata.

Boc continuó su andadura política en las filas opositoras volcado en las grandes maniobras previas a las citas electorales de 2008. El 15 de diciembre de 2007 el PD reforzó su perfil liberal merced a la fusión, en realidad una absorción, con el Partido Liberal Democrático (PLD), agrupación extraparlamentaria puesta en marcha por Stolojan en diciembre de 2006 tras su expulsión del PNL dos meses antes. Boc continuó presidiendo la formación resultante, que recibió el nombre de Partido Demócrata-Liberal (PD-L). Paradójicamente, el logotipo del PD-L, pese a su profesión de fe liberal conservadora, conservó la rosa socialdemócrata del viejo PD.


2. Primer ministro de recambio en 2008

El 1 de junio de 2008 Boc ganó la reelección como primer edil de Cluj-Napoca con un arrollador 76,2% de los votos. El corrimiento electoral en la ciudad transilvana era muy espectacular, si se tenía en cuenta que en las votaciones municipales de 2000 el PD de Roman no pasó del 3%. De cara a las legislativas nacionales del 30 de noviembre, a las que el PD-L llegaba, según las encuestas, con una ligera desventaja tras la lista formada por el PSD y el Partido Conservador (PC) pero ampliamente por delante del PNL, Boc concedió a Stolojan, personalidad con mucho más conocida en el exterior y con una excelente reputación en los gobiernos de la UE, la candidatura al puesto de primer ministro. El alcalde de Cluj-Napoca, en apariencia, no tenía planes de saltar al Ejecutivo nacional si las urnas eran propicias y el partido llegaba al Gobierno.

El 30 de noviembre de 2008, el escaso 39% del electorado que acudió a votar, marcando la participación más baja en unas generales desde la instauración de la democracia, decidió unos resultados muy ajustados. La Alianza del PSD y el PC fue la lista más votada con el 33,1% de los votos y 114 diputados, pero pisada en los talones por el PD-L, que obtuvo el 32,4% y de hecho un diputado más, pudiendo hablarse de empate técnico. El PNL, reforzado por el Partido Nacional Campesino-Cristiano Demócrata (PNTCD), mantuvo el tipo con 65 diputados y la UDMR se estabilizó en los 22. El gran perdedor de la jornada fue el Partido de la Gran Rumanía (PRM) del ultranacionalista Corneliu Vadim Tudor, que no alcanzó el listón del 5% y que por primera vez desde su fundación en 1991 se quedó fuera del Parlamento.

Stolojan dio la campanada al anunciar su disposición a articular un gobierno de amplia mayoría consistente en el PD-L, el PSD y la UDMR. Este tripartito, insólito al reunir a dos partidos, el PD-L y el PSD que, pese a su ancestro común, el FSN, se encontraban casi en las antípodas ideológicas, sería capaz, sostenía Stolojan, de acometer dos "misiones urgentes", cuales eran elaborar unos presupuestos de austeridad para 2009 con un déficit no superior a 3% -el tope fijado por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE, de obligado cumplimiento para ingresar en la eurozona- y relanzar los servicios públicos en la educación, la sanidad y la administración. El economista creía que "la izquierda y la derecha podían resolver juntas" los abundantes problemas nacionales, como la desfalleciente coyuntura económica y financiera, el bajo desarrollo de los sistemas de protección social y la parquedad de los salarios, motivo principal del nulo interés de los trabajadores emigrantes en regresar a su país para cubrir la acuciante demanda interna de mano de obra.

Las negociaciones entre el PD-L y la Alianza PSD+PC, que finalmente no contaron con la UDMR, se desarrollaron con rapidez y el 14 de diciembre Boc y Geoana, en presencia de Stolojan, encargado de formar gobierno por Basescu el día 10, firmaron el programa de la llamada "Asociación para Rumanía", pacto gubernamental que sus artífices valoraron como un hito "histórico" en la política nacional y como la única fórmula capaz de "dar a Rumanía un gobierno estable y eficiente en tiempos difíciles". Boc añadió que el programa conjunto de la primera gran coalición rumana conciliaba "las mejores medidas de la derecha y la izquierda" para superar la crisis económica y responder a las esperanzas de la población. La Asociación para Rumanía sumaba una holgada mayoría absoluta con 229 de los 334 diputados y 100 de los 137 senadores. Entre los 25 objetivos definidos por la Asociación figuraban la protección de los puestos de trabajo y la creación de otros nuevos, la defensa del poder adquisitivo de los rumanos, la independencia y profesionalidad del poder judicial, la conservación del tipo impositivo único del 16%, el apoyo a la agricultura y la reforma de la enseñanza y la sanidad públicas.

La investidura parlamentaria del nuevo ejecutivo estaba prevista para el 22 de diciembre. Pero el día 15, horas después de presentarse la Asociación bipartita, Stolojan, con el mismo carácter súbito e inesperado de su retirada de la campaña presidencial en 2004 –mutis que había catapultado a Basescu a la candidatura presidencial de la DA-, anunció su renuncia a la misión de formar el nuevo gobierno con la vaga y poco convincente explicación de que había que "dar esperanzas a una generación más joven de políticos, para que puedan alcanzar los más altos puestos del Estado". A las pocas horas, Basescu designó como sustituto a Boc, quien recibió el respaldo de Geoana y que certificó el mantenimiento de todos los compromisos firmados por la Asociación y el cronograma institucional.

Los observadores destacaron el pobre caché económico y la limitada experiencia gestora del nuevo primer ministro designado en comparación con Stolojan. Pero no podía pasarse por alto que en sus cuatro años como alcalde de Cluj-Napoca, Boc había atraído mucha inversión extranjera a su terruño, que en muy poco tiempo se había convertido en la tecnópolis rumana de las industrias más punteras y los negocios financieros. El mayor éxito del alcalde había sido el establecimiento en 2007 de una gran fábrica de teléfonos y un centro de investigación por la multinacional finlandesa de las telecomunicaciones Nokia.

El 18 de diciembre Boc desveló la composición del Gabinete, donde su partido se quedaba con nueve puestos, entre ellos los de Defensa, Finanzas y Economía, y el PSD con diez, incluido el recuperado cargo de viceprimer ministro, para Dan Nica. La sensible cartera de Justicia continuó portándola la abogada Catalin Predoiu, en el Ministerio desde finales de febrero y técnicamente independiente luego de darse de baja del PNL. El 22 de diciembre Boc y los ministros recibieron el preceptivo aval parlamentario con 324 votos contra 115, tras lo cual tomaron posesión de sus puestos.

(Cobertura informativa hasta 1/1/2009)