Mirko Cvetkovic

La victoria de la coalición de partidos proeuropeos en las elecciones legislativas celebradas en Serbia en mayo de 2008, tres meses después de la proclamación unilateral de la independencia de Kosovo, ha llevado a la jefatura del Gobierno de la república ex yugoslava a un economista sin militancia política aunque ligado al Partido Democrático (DS), que lidera el presidente Boris Tadic. Mirko Cvetkovic encabeza un Gabinete formado por siete partidos, entre ellos el Socialista (SPS), la antigua formación gobernante durante la autocracia de Slobodan Milosevic, con el que el DS ha aceptado forjar una coalición tan insólita como pragmática; lo que les une, la apuesta por la incorporación de Serbia en la Unión Europea y la defensa de la integridad territorial y la soberanía del país sobre Kosovo.

(Nota de actualización: esta biografía fue publicada el 16/7/2008. El ejercicio de Mirko Cvetkovic como primer ministro de Serbia concluyó el 27/7/2012, al cabo de las elecciones legislativas del 6/5/2012. Su sucesor en la jefatura del Gobierno fue Ivica Dacic).

1. Trayectoria profesional
2. Primer ministro de Serbia


1. Trayectoria profesional

Licenciado y doctorado en Economía por la Universidad de Belgrado, el grueso de su carrera profesional se ha desarrollado fuera de la política, en los sectores público y privado. Desde finales de los años setenta, en las postrimerías del régimen titista, ejerció en el Instituto de Minería de Belgrado y transcurrida una década pasó a desarrollar su especialidad en el Instituto de Economía de la capital de una República Federativa Socialista de Yugoslavia abocada a la desintegración y la guerra civil. En los años ochenta se contrató también como consultor por el Banco Mundial en torno a una serie de proyectos del organismo financiero enfocados en Pakistán, India y Turquía, y por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en relación con Somalia.

Al empezar la década de los noventa, mientras el presidente Slobodan Milosevic establecía en la República de Serbia un sistema de gobierno formalmente democrático pero lastrado por un mando personalista que aunaba los viejos esquemas comunistas y un programa de nacionalismo radical, Cvetkovic se dedicó exclusivamente a las labores asesoras, las cuales realizó para la compañía privada CES Mecon, especializada en la consultoría financiera. En 1998 regresó al Instituto de Minería, al que en los tres años siguientes asesoró en materia económica.

En enero de 2001, ya producida la caída de Milosevic y encaramados los partidos de la hasta entonces oposición democrática a los poderes ejecutivos de la Federación Yugoslava (junto con Montenegro) y de Serbia, el economista fue nombrado viceministro de Economía y Privatización en el Gobierno de coalición presidido por Zoran Djindjic, líder del centroizquierdista Partido Democrático (DS), teniendo como superior directo al ministro Aleksandar Vlahovic. A raíz de la remodelación gubernamental provocada por el asesinato de Djindjic en marzo de 2003, Cvetkovic fue apeado del Ejecutivo, pero continuó en la alta función pública del Estado serbio como director de la Agencia de Privatización. Un año más tarde, cesó a su vez en este cargo y en 2005 retornó al sector privado en calidad de asesor especial de la dirección ejecutiva de la sociedad Intercom Consulting.


2. Primer ministro de Serbia

El 15 de mayo de 2007, con la constitución del segundo Gobierno de coalición encabezado por el ex presidente federal yugoslavo Vojislav Kostunica, líder del Partido Democrático de Serbia (DSS), y que volvió a incorporar al DS, Cvetkovic estuvo de vuelta en el Ejecutivo como titular de la cartera de Finanzas. Aunque no pertenecía a ningún partido y técnicamente era un independiente, el economista fue propuesto al cargo dentro de la cuota ministerial obtenida por el DS -ahora liderado por Boris Tadic, a la sazón presidente de la República de 2004- en las prolijas negociaciones emprendidas con el DSS, el G17 Plus y Nueva Serbia (NS) tras las elecciones legislativas del 21 de enero, cuyo ganador por mayoría simple fue el ultranacionalista Partido Radical Serbio (SRS).

En las elecciones anticipadas del 11 de mayo de 2008, convocadas por la mayoría gubernamental a raíz de la dimisión de Kostunica como expresión de rechazo a la proclamación unilateral de la independencia de Kosovo por la Asamblea de Prístina (el 17 de febrero, en un acto pactado por los partidos albanokosovares con la Unión Europea y Estados Unidos tras el fracaso de las negociaciones con Belgrado sobre el estatus definitivo del territorio), la mayoría de votos, el 38,4%, y de escaños, 102, fue a parar a Por una Serbia Europea-Boris Tadic (ZES), lista impulsada por el presidente de la República, quien trataba de conciliar la defensa indeclinable de la soberanía nacional sobre la provincia autónoma de Kosovo i Metohija con la aspiración de la integración en la UE. Formaban parte del ZES el DS, el G17 Plus, el Movimiento de Renovación Serbio (SPO), la Liga de Socialdemócratas de Vojvodina (LSV), la Liga Democrática de Croatas de Vojvodina (DSHV) y el Partido Democrático de Sandzak (SDP).

La llave de la gobernabilidad cayó en manos del Partido Socialista de Serbia (SPS), la antigua fuerza predominante, arrojada a la oposición tras la insurrección popular contra Milosevic en octubre de 2000, que desde la muerte de su caudillo en marzo de 2006 en La Haya, donde estaba siendo juzgado por crímenes de guerra y contra la humanidad, conducía Ivica Dacic. Ignorando los llamamientos de las capitales de la UE y Estados Unidos para que en Serbia se constituyera un gobierno de firmes credenciales prooccidentales y pivotado sobre los ganadores de las elecciones, el SPS empezó a sondear las posibilidades de formar un gobierno mayoritario con el SRS y el DSS; este tripartito produciría una mayoría absoluta de 128 escaños: 78 de los radicales, 30 de los demócratas y 20 de los socialistas, que habían acudido a los comicios en coalición con el Partido de Pensionistas Unidos de Serbia (PUPS) y Serbia Unida (JS).

Esta opción, que habría tenido unas repercusiones internacionales muy negativas, se diluyó al cabo de unas semanas y entonces Dacic emprendió conversaciones con Tadic. Puestos de acuerdo en que el primer ministro debía colocarlo el DS, Tadic se decantó por el ministro saliente de Finanzas, cuyo perfil más tecnocrático que político fortalecía el peso del SPS en las decisiones del Gabinete a la vez que suprimía la duplicidad de voces cantantes en política exterior, particularmente en todo lo relacionado con la UE y Kosovo, que era lo que había sucedido hasta ahora en la cohabitación con Kostunica, cuyo mayor celo nacionalista rara vez se había acompasado al europeísmo posibilista de Tadic. Del liberal y moderado Cvetkovic, el presidente podía esperar un colaborador útil en el complejo diálogo con Bruselas así como un gobernante concentrado en la política interior y la gestión de la economía.

El 27 de junio Tadic transmitió a Cvetkovic el mandato de formar el nuevo Gobierno y éste estuvo listo el 7 de julio, fecha en que fue investido por la Asamblea Nacional con 127 votos a favor —uno más de los necesarios—, 27 en contra y 96 diputados ausentes. El Gabinete descansaba en una mayoría parlamentaria de 128 diputados pertenecientes a cuatro bloques: el ZES, el SPS y sus satélites, la Coalición Húngara (MK), animada por tres partidos de la minoría magiar instalada en la provincia autónoma de Vojvodina, y la Lista por Sandzak, compuesta por cinco partidos representantes de la minoría bosníaca (eslavomusulmana), concentrada en la región de Sandzak.

En el reparto de carteras, el DS se quedó con diez, incluidas las de Exteriores (para Vuk Jeremic), Defensa (Dragan Sutanovac), Finanzas (Dijana Dragutinovic) y Justicia (Snezana Malovic), el SPS con cuatro y el G17 Plus con seis. Dacic entró en el Gabinete como primer viceprimer ministro y ministro del Interior. Recibieron un puesto cada uno el SPO, el PUPS, el SDP y el Partido de Acción Democrática de Sandzak (SDAS).

En su discurso inaugural, el flamante primer ministro manifestó su intención de impulsar la economía, atender las necesidades sociales y combatir la corrupción y el crimen organizado. Asimismo, aseguró que Serbia jamás reconocería la independencia de Kosovo —paso ya dado por Estados Unidos y la mayoría de los países europeos y de la UE— y prometió poner todo su empeño para conseguir la entrada en vigor del Acuerdo de Estabilización y Asociación (AEA) firmado con la UE el 29 de abril, cuya ratificación condicionaban los comunitarios a la plena colaboración de Belgrado con el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) con sede en La Haya.

En otras palabras, se esperaba de las nuevas autoridades serbias un esfuerzo decidido, tras siete años de titubeos y pretextos, para la captura y entrega de los presuntos criminales de guerra Radovan Karadzic y Ratko Mladic, antiguos jefes político y militar, respectivamente, de los serbios de Bosnia, quienes podrían estar escondidos en Belgrado. Justamente, el Partido Liberal Democrático (LDP), quinta fuerza parlamentaria con 13 diputados, se ofreció a respaldar al Gobierno siempre y cuando éste acatara los requerimientos de Bruselas y La Haya.

La oposición nacionalista expresó sus dudas sobre las capacidades de Cvetkovic, al que señalaron como un responsable "débil" que permitiría a Tadic concentrar el poder en sus manos. Por otro lado, voces de los sectores más liberales y proeuropeos de la sociedad serbia criticaron al DS por sentarse a gobernar con el SPS sin que este partido hubiese hecho el menor gesto de compunción por las calamidades infligidas al país en los años en que disfrutó del poder bajo la férula autoritaria de Milosevic. A los observadores les resultó chocante que Tadic hubiese aceptado otorgar el Ministerio del Interior a Dacic, el miembro del Gobierno menos proclive a organizar la detención del prófugo Mladic o al menos esclarecer su paradero y condición.

El primer ministro de Serbia está casado con Zorica Cvetkovic y es padre de dos hijos.

(Cobertura informativa hasta 16/7/2008)